El alcalde de Vitoria y parlamentario
del PP vasco Javier Maroto pretende
asumir la defensa de la moción
que presentada por la parlamentaria
Laura Garrido provocó el
pasado 16 de octubre el amago de
boicot por el resto de grupos en la
Cámara excepto UPyD. Maroto lo
tiene claro y fuentes de la dirección
‘popular’ confirmaron ayer la intención
del alcalde de activar el debate
sobre las «deficiencas de funcionamiento
» de Lanbide especialmente
después de ratificar sus argumentos
con los datos obtenidos en respuestas
parlamentarias avaladas por el
consejero vasco Juan Mari Aburto.
PNV, PSE y EH Bildu acordaron hace
quince días que no participarían
en el debate lo que provocó que el
PP retirara del orden del día su moción.
Estos partidos mantendrán
conversaciones en las próximas horas
para determinar si se ejecutarán
este boicot pasado mañana o modifican
su posicionamiento inicial.
El alcalde de Vitoria Javier Maroto
decidirá definitivamente en
las próximas horas si, tal como le
pide el cuerpo, asume la portavocía
del PP vasco en el debate sobre
una moción de cinco puntos en la
que se plantea de forma genérica
la «mejora de la eficacia y eficiencia
» del Servicio Vasco de Salud
pero en la que también se incorporan
otras ideas como la «redefinición
» de su estructura, la creación
de una Unidad de Control Interno
encargada de la inspección y seguimiento
de las ayudas además
de mejorar en el objetivo de la
búsqueda de empleos para los demandantes
de trabajo.
La participación de Maroto como
portavoz en sustitución de su compañera
Laura Garrido que fue quien
presentó esta moción tras una interpelación
anterior volverá a colocar
al alcalde de Vitoria en el foco de
atención mediática y del debate social.
Maroto anunció la puesta en
marcha de una Iniciativa
Legislatura
Popular con la que
presentar una modificación
de la actual
RGI. El PP vasco
ya ha puesto en
marcha su maquinaria
para apoyar a este grupo de
ciudadanos pero aún no desvela
cuándo comenzará a recabar el
apoyo de los ciudadanos vascos. Todo
apunta a que Maroto tomará distancia
de esta iniciativa impulsada
por él mismo que tendrá como objetivo
recabar los 30.000 apoyos para
que se inicie el debate parlamentario
sobre la propuesta planteada.
El PP retiró el pasado 16 de octubre
su iniciativa parlamentaria y
corre el riesgo de quedarse absolutamente
sólo en su moción que
incluye a Lanbide la exigencia de
presentar un informe sobre su situación
aunque traslada su presentación
a la finalización del actual
periodo de sesiones. El resto
de partidos –a excepción de
UPyD– analizará a partir de hoy
si mantienen su primera intención
de vetar este tipo de debates.