Al menos tres inmigrantes de origen subsahariano habrían logrado acceder a Melilla esta madrugada superando el triple vallado fronterizo que separa la ciudad española de la provincia marroquí de Nador.

Estos tres jóvenes, dos marfileños y un beninés, llegaban al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) pasadas las 06:30 horas y a la carrera descalzos, heridos y provistos únicamente de algo de ropa de abrigo.

Media hora antes, junto a unos 200 compatriotas, protagonizaban un salto por la zona fronteriza más sur de la ciudad autónoma, entre el paso fronterizo de Beni Enzar y el límite marítimo austral conocido como Dique Sur.

Los inmigrantes, además de utilizar este lugar poco común para acceder a España, aprovecharon la lluvia, el viento y la densa niebla para despistar a las fuerzas de seguridad de ambos lados del perímetro fronterizo y lograr su cometido.

Según fuentes policiales, podrían ser más los inmigrantes que hubieran accedido a suelo español y que irían llegando por su propio pie al CETI a lo largo del día.

Las organizaciones defensoras de derechos humanos aseguran que los inmigrantes van buscando nuevas rutas intentando sortear las zanjas que ha construido el Gobierno marroquí para dificultar la entrada a Melilla, así como la nueva valla de cuchillas que marruecos está levantando paralela a la alambrada española y cuyas obras están ya muy avanzadas.

La presión migratoria sobre la ciudad autónoma no desciende y se calcula que más de 600 inmigrantes permanecen acampados en el monte Gurugú. El último acercamiento al perímetro fronterizo se registraba la madrugada del domingo al lunes, cuando unos 150 inmigrantes se aproximaron al perímetro fronterizo por la zona cercana al aeropuerto.

El pasado día 8 de octubre se producía la última entrada de inmigrantes a través del vallado, cuando tras dos saltos, al menos 15 inmigrantes lograban entrar a Melilla, según la policía marroquí, aunque finalmente sólo uno logró entrar en el CETI, según confirmaba la Delegación del Gobierno.