El mar Mediterráneo se ha cobrado este miércoles, de nuevo, la vida de dos inmigrantes. Han fallecido a pocos kilómetros de España, en las aguas del Estrecho próximas al islote Perejil. Allí los ha hallado, pasadas las cinco y media de la tarde, el buque Salvamar Atria de Salvamento Marítimo, que participaba en la búsqueda de una patera desaparecida. En ella viajaban ocho personas, según la llamada de alerta que ha recibido la institución, que ha confirmado la muerte de los dos sin papeles —ambos varones y de origen subsahariano—.

El dramático rescate ha comenzado pasado el mediodía. Salvamento Marítimo ha subrayado que, a las dos de la tarde de este miércoles, una cooperante española ha avisado al Centro de Tarifa de la salida de una patera rumbo a la Península. La embarcación, según el relato de la mujer, había partido en la noche del martes de las proximidades del puerto de Tánger – Med (Marruecos). Cinco hombres y tres mujeres se encontraban a bordo, según la alerta recibida por la institución, que no ha encontrado la embarcación de los inmigrantes y, por ello, no ha podido confirmar si los fallecidos viajaban en ella.

Tras tres horas de trabajo, Salvamar Atria ha localizado el primer cuerpo sin vida a las cinco y media. Apenas media hora más tarde, ha hallado el segundo. Todo ello, en un dispositivo de búsqueda que ya se ha suspendido y que ha contado también con la participación del helicóptero Helimer – 205. Ambos han peinado, a lo largo de la tarde, la superficie del mar en busca de los supuestos desaparecidos. Los servicios de rescate se han enfrentado a un fuerte temporal de viento, con rachas de hasta 90 kilómetros por hora, que azota la zona del Estrecho y que se baraja como la causa del hundimiento de la patera.

Estos dos nuevos fallecidos se suman a la trágica lista publicada este martes por la Organización Internacional de las Migraciones (OIM): más de 3.000 sin papeles han muerto en 2014, al tratar de cruzar el Mediterráneo para alcanzar las costas europeas. El 30% procedía del África subsahariana. De hecho, de esa parte del continente llegan el grueso de personas que intentan arribar a España en patera.

Tan solo este verano, hasta 2.601 inmigrantes han alcanzado la costa andaluza en este tipo de embarcaciones. La mayor parte (1.299) llegó a Tarifa (Cádiz) entre el 10 y 12 de agosto, cuando Marruecos relajó la vigilancia de sus costas —el Gobierno africano reconoció entonces que se produjeron "disfunciones"— y más de 100 botes hinchables se lanzaron al mar camino de la Península. Nunca antes se había producido semejante aluvión de pateras a las playas gaditanas.