el drama de la inmigración

El PP defiende las concertinas porque han “reducido las entradas ilegales en un 80%”

"No nos centremos solo en los medios que garantizan la frontera", subrayan los populares

El País, J. Jiménez Gálvez , 24-09-2014

Al debatir sobre inmigración, los grupos de la oposición han vuelto a toparse este miércoles con el PP en el Congreso. Los populares han tumbado en la Comisión de Interior, con sus 23 votos en contra, la proposición no de Ley de CiU de retirar las concertinas de las vallas de Ceuta y Melilla. El partido en el Gobierno, para rechazar la propuesta, ha alegado el “extraordinario” descenso de los intentos de salto en los 2,5 kilómetros de frontera donde el Ejecutivo reintrodujo las cuchillas en 2013. “Transcurrido casi un año desde su instalación en Melilla, se han reducido en un 80%”, ha expuesto Gema Conde (PP), que ha afirmado que en esos puntos se concentraban antes el 90% de los saltos.

“Tratemos la inmigración desde una perspectiva integral y no centrándonos en exclusividad en los medios materiales que garantizan nuestra frontera sur”, ha subrayado la diputada popular en la Comisión de Interior, donde ha insistido tras las críticas de la oposición en que “no existe una normativa internacional, ni europea, ni nacional que prohíba su uso”. Dicho argumento ya ha sido utilizado por el Ejecutivo en reiteradas ocasiones, desde que reintrodujese las concertinas a finales de 2013 en lo alto de la valla exterior de Melilla; de donde las había quitado el Gobierno de Zapatero en 2007 por las presiones de los colectivos, después de instalarlas en 2005.

La proposición no de Ley ha llegado a la Cámara de la mano de Antoni Picó, diputado de CiU. Con un discurso muy duro, el parlamentario catalán ha acusado al Ejecutivo y a la UE de poner en marcha una política de inmigración que supone, con la instalación de las cuchillas, “una crueldad desmedida”. Estas, defiende el convergente, representan “un riesgo para la integridad física de las personas”. Y además “resultan inefectivas”. Más de 1.800 sin papeles han entrado en Melilla tras saltar la verja en los primeros nueve meses de 2014. En todo 2013, según el Ministerio del Interior, llegaron a la ciudad autónoma 2.490 inmigrantes utilizando todas las vías posibles —además de a través de la verja, en patera o en dobles fondos de vehículo, por ejemplo—.

“Las concertinas atentan contra los derechos humanos más elementales. Deben existir otros métodos sin menoscabo de la seguridad”, ha remachado Picó, antes de que el PSOE, IU y UPyD apoyaran su propuesta. “Cada vez que se ponen las cuchillas, en el hospital de Melilla nos dicen que nunca han cosido tanta carne”, ha apuntado Ricardo Sixto, de la coalición de izquierdas. Y ha continuado Rosa Díez, de la formación magenta: “No es un instrumento disuasorio, pero sí un instrumento inhumano, inaceptable”.

La representante de UPyD ha calificado las concertinas como “un instrumento de tortura” que “avergüenzan a cualquier demócrata”. “Vamos a dejar de llamar concertinas a lo que son alambres de cuchillas. A ver si así nos da un poquito más de vergüenza”, ha destacado. Su intervención ha precedido a la del socialista Felipe Jesús Sicilia, que también ha considerado una “barbarie” su recolocación en las vallas: “Sí, estuvieron cuando gobernó el PSOE. Pero, al ver que eran totalmente ineficaces y que causaban graves daños, las retiró”.

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