El empleo extranjero se da a la fuga
UNo de cada cuatro afiliados de otros países ha dejado de cotizar a la seguridad social durante la crisis
Deia, , 24-09-2014LA Seguridad Social perdió 17.941 afiliados extranjeros en agosto para encadenar dos meses consecutivos de descensos y entrar de lleno en una tónica habitual para los trabajadores forasteros, pero que se ha acentuado durante la crisis. Las contrataciones se activan cada año poco antes de la Semana Santa y empiezan a retroceder a mitad de verano. Hasta 2008, el tramo favorable tenía mayor intensidad y el saldo final del año era siempre positivo, se ganaban cotizantes extranjeros cada año.
La dinámica ha cambiado y la prueba más evidente son los 569.057 afiliados que han salido del sistema desde el máximo histórico registrado en julio de 2008. Ese mes trabajaban en el Estado casi 2.152.000 forasteros, hoy solo lo hacen 1.582.823, un 26,4% menos. En otras palabras, uno de cada cuatro extranjeros ha dejado de cotizar.
La caída es mucho más acusada que en el caso de los trabajadores locales, que se han reducido en un 12,7% desde su máximo histórico. Con todo el impacto de la recesión en el mercado laboral ha recortado en casi 2.200.000 el número de afiliados estatales. La fuga de extranjeros ha continuado y, en los últimos doce meses, cerca de 25.000 personas han abandonado o han sido expulsados del mercado laboral. El efecto retorno de inmigrantes que han visto rotas sus expectativas y deciden volver a su casa se suma a los despidos y cierres de empresas para consolidar el desplome de la afiliación de ciudadanos de otros países.
evolución en Euskadi Agosto ha reincidido en ese esquema. Prácticamente todas las comunidades autónomas perdieron trabajadores extranjeros y las pocas que los ganaron lo hicieron de forma muy discreta. De este modo, para el conjunto del Estado el retroceso fue del 1,12% (un – 1,5% en términos interanuales). En Hegoalde trabajan un 4,24% del total de afiliados de otros países. En concreto, 47.129 lo hacen en la CAV y 20.101 en Nafarroa. Precisamente la Comunidad foral es una de las que mejora su balance mensual, con un crecimiento del 2%, 409 afiliados más. Sin embargo ese avance no corrige el dato interanual, que refleja una caída de 1.021 trabajadores ( – 4,8%) desde agosto de 2013. Esta evolución es más negativa que la de la CAV, que ha perdido 1.410 cotizantes extranjeros, un – 2,9%.
Uno de cada tres trabajadores inmigrantes de la CAV es empleado del hogar (11.787), pero también tiene un gran peso la hostelería (más de 7.800, el 17%), el comercio (unos 6.000) y la industria manufacturera (por encima de los 3.800). En Nafarroa también hay una mayoría afiliada al sistema especial del hogar (3.258), pero este colectivo no llega a alcanzar el 19% y tiene en cambio mayor potencial el régimen agrario, con 2.665 cotizantes, el 15% frente al 2,8% de la CAV. Los autónomos suponen en Hegoalde el 14,7% del total de afiliados inmigrantes, muy cerca del 15% de España.
En el conjunto del Estado destaca el aumento del número de afiliados extranjeros autónomos durante la crisis. En concreto, cotizan en ese régimen 238.618 personas, unas 900 más que en el inicio de la crisis. Pero lo más llamativo es que desde enero de 2011 ha crecido en casi 41.000 personas, un 20,7%.
Hay más emprendedores, extranjeros que se deciden a poner un negocio, pero las estrecheces del mercado laboral también han disparado el número de falsos autónomos, personas que cotizan como autónomos pero que en realidad acuden cada día a una empresa para ocupar un puesto como el resto de la plantilla. En cuanto a la nacionalidad, la mayoría de los cotizantes forasteros de la CAV son rumanos, en Nafarroa destaca en cambio la presencia de marroquíes.
Tras el constante goteo de pérdida de empleos extranjeros, este colectivo representa hoy un 9,5% de la fuerza laboral total, frente al 11,% de antes de la crisis. Solo la caída generalizada de los cotizantes ha evitado que su peso caiga de forma más notable y la tendencia apunta a que tendrán que pasar muchos años antes de que muerdan un trozo mayor de la tarta.
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