Gasteiz – Apenas un puñado de 200 votos puede determinar quién será el próximo alcalde de Gasteiz. Así de apretadas están las previsiones electorales, según refleja la primera entrega de la encuesta de intención de voto realizada por Gizaker para el Grupo Noticias, un sondeo efectuado a través de 400 entrevistas entre el 12 y el 16 de septiembre. Esta foto pone sobre la mesa un empate técnico entre las candidaturas encabezadas por el aspirante jeltzale, Gorka Urtaran, que ganaría por poco los comicios de 2015; y el actual alcalde del PP, Javier Maroto. Esta extrema igualdad es consecuencia de la evolución ascendente de Urtaran y, por el contrario, entraña un ligero descenso de desgaste del primer edil popular en los estertores de su mandato. Aun así, y a pesar del deterioro de la marca PP, Maroto mantiene parte del tirón que le llevó a la Alcaldía en 2011 y su condición de verso libre le reporta un aprobado en valoración, al igual que el candidato del PNV, empatando ambos también en esta nota (5,1).

Maroto perdería ocho puntos respecto a 2011, aunque la ventaja que obtuvo entonces le da rédito para aguantar el tirón pese a quedarse dos décimas por debajo de Urtaran, el equivalente a apenas dos centenares de votos. A su vez, y si el PNV resultó ser la lista más votada en Gasteiz en las autonómicas de 2012, la desmovilización de su electorado le relegó a la cuarta plaza en las europeas del pasado mayo. Esto denota que la asignatura pendiente de la formación nacionalista es la movilización de su propio electorado ante la posibilidad de derrotar a Maroto. Bildu – la formación que menos oscilaciones ofrece en su evolución electoral – se quedaría con un edil menos que jeltzales y populares, conservando los 6 que representan hoy en día a la coalición.

Si algo ha marcado la actualidad ha sido la polémica visión del alcalde, respaldada por el diputado general Javier de Andrés, sobre la actitud de ciertos colectivos de inmigrantes y las ayudas sociales. Más de la mitad de los gasteiztarras (53%) está de acuerdo con la óptica del actual alcalde, pero eso no impide que un porcentaje similar (55%) considere que declaraciones de este tipo crean “más crispación” en la sociedad, sobre todo cuando se trata de un alto dirigente.

Bildu es el tercero en discordia con un porcentaje de votos alejado por tres puntos de las perspectivas que la encuesta dibuja para PNV y PP. El actual portavoz de la coalición soberanista, Kike Fernández de Pinedo, también se sitúa en el tercer peldaño de las valoraciones ciudadanas, con un aprobado raspado y por encima del socialista Patxi Lazcoz, suspendido tras ejercer de alcalde entre 2007 y 2011. No obstante, ambos podrían abandonar su condición de aspirantes en favor de otros compañeros, por lo que la imagen que de ellos extrae el electorado no tendría influencia en los resultados de mayo.

La irrupción de Podemos con tres concejales es la gran novedad. Esta fuerza progresista es la única de los considerados partidos pequeños que supera la barrera del 5% que abre las puertas del Ayuntamiento.

Su incorporación también tiene un reflejo directo en el reparto de la tarta electoral, de forma que descoloca al PSE del actual cuadrilátero municipal, dejándolo únicamente en cuatro concejales, dos menos de los que tiene actualmente. Así, la composición del Ayuntamiento gasteiztarra ofrece un cuadro complicado para la gobernabilidad municipal. Y es que la histórica minoría con la que el candidato ganador debe afrontar el gobierno del consistorio también va a ser una constante tras los comicios municipales y forales de mayo del próximo año.