La Policía Local de Melilla, junto con la Policía Nacional, procedió ayer a desmontar varias chabolas que habían sido construidas por inmigrantes en las inmediaciones del Centro de Estancia Temporal (CETI). Según informó el delegado del Gobierno en la ciudad, Abdelmalik El Barkani, esta operación estaba prevista «desde hace algún tiempo», pero no se ha podido llevar a cabo hasta ahora porque los servicios de la Ciudad Autónoma estuvieron la semana pasada dedicados a «otra necesidad», levantar el recinto ferial.

El delegado fue tajante y aseguró que no se va a permitir que proliferen las chabolas, por lo que apuntó que los inmigrantes que estén en Melilla deben estar en el CETI. La operación de derribo de las chabolas, según informó la Delegación del Gobierno en un comunicado, se inició a las 8.00 horas en el cauce del Río de Oro, donde se encontraban ubicadas, y finalizó dos horas después.

Las chabolas se encontraban vacías y desalojadas con carácter previo a la intervención policial, motivo por lo que no se han producido ni identificaciones ni detenciones, por lo que la operación se desarrolló «sin ningún incidente». En el operativo participaron agentes de la Policía Local y 16 agentes de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) de la Policía Nacional, al tiempo que se utilizó una pala excavadora y un camión donde se han depositado los escombros. El Barkani reconoció que el CETI sigue saturado, pero insistió que es en este centro donde los inmigrantes deben estar, porque lo que se quiere es «lo mejor para ellos».