Alternativa por Alemania ha conquistado los Parlamentos de Turingia, Brandeburgo y Sajonia. Sin embargo, todo el espectro político ha rechazado aliarse con ellos

Con la resaca del triunfo moral del domingo en las elecciones regionales de Turingia y Brandeburgo, el presidente de los euroescépticos de Alternativa por Alemania (AfD), Bernd Lucke, ha anunciado el lunes una campaña contra la unión bancaria: «Hay que decírselo a la gente (…)», «que es una amenaza para los ahorristas alemanes», «la unión bancaria será financiada al final por los clientes de los bancos», ha advertido el economista y eurodiputado recordando que la deuda de los bancos «es tres veces mayor que la deuda soberana». Lucke ha insinuado que «Los tests de estrés siguen sin ser publicados y nadie sabe por qué».

Con un discurso populista que se parece al que tenía los democristianos de la CDU veinte años atrás, AfD lleva conquistados tres Parlamentos regionales: con 10,6 % de los votos en Turingia, 12,2 % en Brandeburgo, 9,7 % en Sajonia (hace dos semanas) y siete eurodiputados, el partido de Lucke ha iniciado campaña para las elecciones del próximo año en Hamburgo y Bremen. El fenómeno AfD es una mezcla de voto de protesta, euroesceptiscismo ultraderechista, mano dura contra criminalidad, leyes de asilo más restringidas, defensa de la familia tradicional y mayor control de la inmigración.

A diferencia sin embargo del casi extinto partido Pirata que naufragó gracias a desacuerdos internos y viendo el posicionamiento de Lucke como líder, AfD parece que viene para quedarse. «La respuesta adecuada del resto de los partidos debe ser la confrontación política con AfD», apuntó la canciller Angela Merkel el fin de semana en su calidad de presidenta de la CDU, indicando así su rechazo a negociar con AfD.

Brandeburgo es un tradicional bastión de los socialdemócratas del SPD y Turingia lo mismo de la CDU, y ambos partidos obtuvieron mayorías. Gracias al AfD, sin embargo, menos de lo esperado. Con exmilitantes de ultraderecha en sus filas, los euroescepticos han conquistado votos de todo el espectro político excepto de Los Verdes y al mismo tiempo: todo el espectro político ha rechazado aliarse con ellos. Lucke ha destacado el fenómeno: «Esta postura de derecha o izquierda no encaja con la AfD. Nos dirigimos a todos los estratos de la sociedad y a todo el espectro político. Somos un pequeño partido popular», ha indicado el eurodiputado.