«No van a volver de ninguna de las maneras», es la firme respuesta del Real Madrid después de la nueva reaparición de la facción mas violenta de los Ultras Sur durante el pasado fin de semana. Este grupo radical, expulsado del Santiago Bernabéu por la directiva hace dos años, colgó el sábado de madrugada una decena de gigantescas pancartas en varios puentes de la M-30 de Madrid. En los carteles pedían la dimisión de Florentino Pérez y censuraban su forma de dirigir el club. «Las manos de ACS fuera del Madrid», «El Real Madrid de los socios o de Florentino y sus negocios», «Tu proyecto deportivo colocar bien el ladrillo», rezaban las pancartas. Su osadía fue aún mayor ya que cerca del Santiago Bernabéu pintaron una esvástica de cinco metros de diámetro cerca de la zona de bares donde se reunía este grupo radical antes de los encuentros.

A lo largo de la misma madrugada del sábado el club recibió varias llamadas advirtiéndoles de la colocación de los carteles y de las pintadas. Ese mismo día fueron retiradas. Con todo, fuentes policiales indicaron que, previamente, el Real Madrid pidió al Ayuntamiento de Madrid permiso para quitarlas. También el club borró la gigantesca esvástica que los ultras pintaron cerca del bar Drakkar, en la calle Marceliano Santa María, muy cerca del Bernabéu. Los autores de al menos una de las pintadas se retrataron con ella y colgaron la imagen en una red social.

Entre los que aparecen en la fotografía está Antonio El Niño, uno de los cabecillas de los Ultras Sur que cuentan con un amplio historial delictivo y al que se le considera ahora el cerebro de Outlawmadrizz, un grupo nazi que ha tratado en los últimos meses de hacerse con el control del Frente Atlético y de los Ultras Sur. De hecho, el pasado mes de diciembre El Niño fue detenido tras apuñalar a un seguidor rojiblanco en el bar Duratón cercano al estadio Vicente Calderón y tres meses después era arrestado de nuevo bajo la acusación de robar a narcotraficantes. En esta última operación policial también se arrestó a su hermano Quique, y Javi El Bombero.

Otro de los que figura en la fotografía con la esvástica es Javier Antuñano, alias El Fichaje, líder de la peligrosa organización neonazi Hammerskin, uno los grupos de rapados más ultra y violento que operaban en España. En 2004 El Fichaje fue detenido por la Guardia Civil junto con otros 14 neonazis más en una operación contra los Hammerskin. En su casa de Villalbilla de Madrid se hallaron 43 camisetas con emblemas y símbolos neonazis, 38 fotografías de símbolos neonazis y las cintas de vídeo Las SS, Sangre y Fuego y Adolf Hitler. Los otros que están en la foto de la esvástica son Julián y Mojarro, otros dos conocidos ultras. La Policía considera que El Niño y El Fichaje controlaron durante varios años el grupo Ultras Sur y que comercializaban con entradas del Real Madrid junto a Álvaro El Cadenas. Estos tiques eran revendidos a 20 euros y además les pagaban comisiones dependiendo de su lugar de venta. Al no ser nominales, resultaba imposible controlar quién las compraba y quién acudía al campo.

Aprovechando una guerra de poder dentro de Ultras Sur, el Madrid decidió la pasada temporada acabar de raíz con este grupo y retiró los carnés a casi un centenar de sus integrantes más violentos. Al mismo tiempo se creó una grada joven de animación en el fondo sur, limpia de radicales. El Real Madrid ha decidido esta temporada situar esta zona en el tercer anfiteatro y denominarla Minuto 93. Con motivo del partido de Champions de mañana, el club teme nuevos movimientos de los ultras tanto a las puertas del estadio como dentro del mismo, donde podrían entrar si compran localidades sueltas.