El fiscal Superior del País Vasco, Juan Calparsoro, ha incoado diligencias de investigación por las palabras del alcalde de Vitoria, Javier Maroto, sobre los inmigrantes magrebíes y el uso que hacen de las ayudas sociales. Calparsoro ha explicado que el fiscal de Álava le ha remitido la denuncia que presentó en Vitoria el colectivo de Sos Racismo contra Maroto y está a la espera de recibir un segundo escrito de esa asociación, dado que además de alcalde, es parlamentario en la Cámara vasca y por lo tanto, disfruta de la condición de aforado.

Por su parte, Maroto ha asegurado respetar la decisión del fiscal superior y encontrarse tranquilo porque considera que sus palabras no pueden constituir un delito, según fuentes de la alcaldía de Vitoria.

La polémica por el cobro de las ayudas sociales en Vitoria surgió el pasado mes de julio, después de que Maroto denunciara que algunos inmigrantes “viven principalmente de las ayudas sociales y no tienen ningún interés en trabajar o integrarse”, además de tachar de “escandaloso” el caso de los ciudadanos de origen argelino y marroquí que llegan al País Vasco.

Calparsoro ha determinado “incoar diligencias para determinar el alcance de esas palabras y ver si tienen o no carácter penal”. Entre las diligencias a realizar, el fiscal no baraja de momento la posibilidad de citar a declarar al alcalde si bien, ha dicho, que no lo descarta. El colectivo denunciante considera que Javier Maroto incurrió en los posibles delitos de incitación al odio y contra la dignidad de las personas.