Melilla inicia esta madrugada la denominada Operación Feriante, un despliegue policial que blindará el puerto y el recinto ferial para evitar la salida a la península de inmigrantes ocultos en los camiones de las atracciones que han permanecido esta semana durante las fiestas locales.

Según han señalado a Efe fuentes policiales, como cada año, equipos operativos de la Policía Nacional, con la colaboración de la Policía Local, actuarán durante la madrugada del lunes día 8 en la plaza multifuncional de San Lorenzo, donde se ubican las atracciones, para impedir la aproximación de inmigrantes.

En el camino hasta el puerto, donde los feriantes irán embarcando a lo largo del día en los distintos barcos, también habrá presencia policial para evitar que alguno pueda aprovechar los semáforos para meterse en el amasijo de hierros que componen las atracciones.

Ya en el recinto portuario, el control previo al embarque corresponderá a la Guardia Civil, cuyos agentes, especialistas en registros de vehículos, contarán con la ayuda de perros adiestrados en la localización de personas.

Los inmigrantes que lo intentan son mayoritariamente marroquíes y argelinos, que buscan dar el salto en la península para probar suerte, entre los cuales hay también algunos menores.

La Operación Feriante se cerró el pasado año con 152 interceptados, de los que casi 70 eran menores.

Además, el dispositivo permitió localizar 147 kilogramos de hachís ocultos en uno de los camiones de las atracciones, cuyo dueño fue el que alertó a la Policía.