Nueva patera arribada a las costas de Alicante. La embarcación es la octava que llega a la Comunitat en apenas un mes, desde comienzos de agosto, con 57 personas a bordo como cifra total, según indicaron fuentes de Cruz Roja. La llegada de la embarcación ha renovado un temor manifestado ya hace unas semanas por la Guardia Civil: sigue sin existir un protocolo específico, que se haya comunicado a los agentes, sobre cómo tratar a personas que puedan llegar con el virus del ébola o alguna otra enfermedad infecciosa, según indicaron a LAS PROVINCIAS fuentes sindicales de la Benemérita.

La patera fue interceptada por una embarcación de la Guardia Civil en torno a las 7.50 horas. A bordo viajaban inmigrantes de Libia y Argelia, todos ellos mayores de edad y en buen estado de salud. La embarcación fue avistada por los agentes a 2,5 kilómetros del faro de Santa Pola.

Los inmigrantes fueron trasladados a las dependencias del Servicio Marítimo del Puerto de Alicante y posteriormente quedaron a cargo de la Policía Nacional, según Europa Press.

Voluntarios de Cruz Roja realizaron a los inmigrantes pruebas sanitarias básicas como toma de tensión, glucosa o curas de las heridas. También les proporcionaron ropa de abrigo, alimentación y bebida. Dos de los ocupantes de la patera tuvieron que ser trasladados en ambulancias a hospitales de Alicante, uno de ellos como consecuencia de una lesión en el hombro y otro por una torcedura de tobillo.

Sólo una lancha más

La mayor vigilancia de las costas españolas anunciada a mediados del mes pasado por el Ministerio del Interior tras una primera oleada de pateras no parece haber tenido efecto. En ese fecha, el Gobierno adquirió nueve embarcaciones para aumentar el control de la inmigración ilegal. Sólo una de ellas iba destinada para la Comunitat. El propio delegado del Gobierno en la Comunitat, Serafín Castellano, anunció que se iba a «reforzar» la vigilancia.

Pocos días antes, tras llegar en apenas unas jornadas tres pateras a Alicante, guardias civiles mostraron su intranquilidad por la falta de un protocolo para tratar a pacientes que pudieran llegar infectados con el ébola. A día de hoy, nada ha cambiado, según fuentes de la Benemérita.

La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) de Alicante transmitió a las autoridades la preocupación y el desconocimiento de agentes que, entre otros, participan en servicios como la interceptación de pateras con inmigrantes ilegales, «frente a esta enfermedad tan contagiosa y fácil de propagar».

La asociación hizo hincapié en los agentes que trabajan en puertos, aeropuertos, Servicio Marítimo, Patrullas Fiscales, Edati y Seguridad Ciudadana, los primeros en contactar con personas de otros países, «ya sea por buques o aviones o por medios de entrada ilegal en nuestro país, como puedan ser las denominadas pateras».