Un hombre de nacionalidad rumana de 32 años de edad fue encontrado muerto ayer por la tarde en su domicilio del número 104 de la calle de Alcalá con un cuchillo de cocina clavado en un costado, según fuentes de la Jefatura Superior de Policía de Madrid y Emergencias Comunidad de Madrid-112.

Los agentes tratan de averiguar si el hombre fue asesinado o si se quitó la vida él mismo. Según las primeras hipótesis, podría tratarse de un crimen pero posteriormente los familiares del fallecido indicaron que la víctima atravesaba un mal momento y estaba muy deprimido en los últimos días.

Sobre las 18.15 horas la mujer acudió al domicilio donde residía junto a su hijo, un piso bajo situado entre Manuel Becerra y la plaza de Toros, en el barrio de Goya del distrito de Salamanca.

La esposa no pudo abrir la puerta de la vivienda ya que la llave no le funcionaba. Llamó varias veces al timbre pero nadie le abría. También telefoneó al móvil de su marido pero no respondía. Finalmente, decidió avisar al conserje del edificio.

El portero utilizó otro juego de llaves y entró junto a la mujer en la casa. Al pasar se toparon ambos con el cadáver del hombre en la cocina. Tenía un cuchillo clavado en el costado izquierdo de su cuerpo, según fuentes policiales.

La mujer telefoneó a la Policía sobre las 18.30 horas indicando que su marido se encontraba tumbado en el suelo, inconsciente y sangrando abundantemente.
Hasta el domicilio se desplazó un vehículo de intervención rápida y una UVI del Summa. Los médicos confirmaron que el hombre ya no tenía pulso y certificaron su muerte. También acudieron al edificio los agentes del Cuerpo Nacional de Policía y de la Policía Municipal del distrito.

El Grupo de Homicidios se ha hecho cargo de la investigación. Los agentes interrogaron ayer tarde a la mujer del fallecido y a varias personas que vivían en el inmueble. La casa no estaba revuelta por lo que se descartó que el fallecido hubiese sufrido un robo.

Por su parte, una psicóloga del Samur acudió también a la vivienda para atender a la mujer del fallecido.