Internacional

La campaña de los comerciantes para «no dar limosna a los mendigos» se extiende a toda Italia

ABC, ángel gómez fuentes corresponsal en roma, 23-08-2014

El primer cartel apareció en un supermercado de Sicilia, donde se invitaba a no entregar dinero a los gitanos porque así ganaban unos 80 euros diarios sin impuestos

Después del primer caso en un supermercado de Catania (Sicilia, Italia), se extiende como una mancha de aceite la protesta de comerciantes contra los gitanos o mendigos que piden limosna a las puertas de sus negocios. Así, ante el supermercado Conad de Ferrara (Emilia Romagna), ciudad de 134.000 habitantes, se ha colocado una pizarra en la que la dirección da un parecido mensaje al del cartel aparecido en Catania:



«Se invita a los clientes a no dar limosna a los mendigos delante del negocio», «su mendicidad les permite recoger entre 60 y 100 euros al día», es decir, «lo mismo que un obrero especializado italiano». Y concluye que se trata de una cifra «neta, sin impuestos».


«No deis limosna a los gitanos. Ganan 80 euros al día». De inmediato levantó gran polémica esta advertencia escrita en un cartel en la puerta de un supermercado de Catania, en la plaza Cavour, según cuenta el diario «La Sicilia». El cartel levantó ampollas en la comunidad gitana. Textualmente, este es el escrito: «La dirección del supermercado invita a sus clientes a no dar limosna a los gitanos delante de la puerta. Su mendicidad les permite ganar entre 60 y 80 euros, una cantidad de dinero que un obrero especializado italiano no logra ganar, considerando que se trata de un importe neto sin impuestos. Os damos las gracias por la colaboración».


La decisión del supermercado ha suscitado un gran debate y polémica entre los clientes, con opiniones que se dividen entre las exigencias de la caridad y solidaridad con los más desfavorecidos, por un lado, y las necesidades de seguridad, por otro.


Al mismo tiempo, la comunidad nacional gitana de Italia ha pedido en un comunicado «la eliminación inmediata del cartel que incita al odio racial contra la etnia gitana», porque es «altamente dañino a la dignidad humana». La asociación pide también «la apertura de una investigación de la oficina nacional contra la discriminación racial». Concluye el comunicado de la asociación que «la pobreza en la que viven las familias de raza gitana es el fruto de precisas y determinadas voluntades político – institucionales de las clases dirigentes que han gobernado el país en los últimos 20 años. En Italia hay 10 millones de pobres. La minoría de etnia gitana está entre las más excluidas de toda la población nacional. Pedir limosna es la única forma de ingresos de miles de personas para no morir de hambre».


En relación con la cifra de 60 – 80 euros, la dirección del supermercado afirma que es «cierta», porque al final de la jornada los gitanos vienen a las cajas para pedir que se les cambie las monedas por billetes». Finalmente, el supermercado rechaza la acusación de racismo: «No somos racistas. Queremos simplemente tutelarnos. Nuestra iniciativa quiere ser un estímulo para el debate, y esperamos que quien puede hacerlo actúe para hacer respetar las leyes».

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