Unos doscientos inmigrantes de origen subsahariano protagonizaron ayer un nuevo intento de entrada a Melilla, aunque ninguno de ellos consiguió acceder a la ciudad, ya que fueron contenidos por las fuerzas de seguridad de Marruecos antes de tocar la valla fronteriza, informaron a Efe fuentes policiales.

La tentativa se produjo a plena luz del día, sobre las 12:00 horas, en las inmediaciones del puesto fronterizo de Barrio Chino.

Tras ser avistado el grupo, se puso en marcha un protocolo de actuación en ambos lados del vallado, que en la parte española contó con un amplio despliegue de la Guardia Civil, reforzado desde el aire por un helicóptero del instituto armado.