El colegio de Las Albarizas mantendrá durante este mes de julio y el próximo agosto las tres comidas al día para 80 niños en riesgo de exclusión social de entre 4 y 14 años. Con un presupuesto de 31.571 euros, esta medida se enmarca en el Plan de Garantía Alimentaria que contempla del Decreto – Ley de Inclusión a través del Empleo y Medidas Extraordinarias aprobado por la Junta de Andalucía.

Las tres comidas constan de desayuno, almuerzo y merienda, aunque esta última se la llevan los niños a sus casas una vez que a las tres de la tarde se cierra la escuela de verano que abre a las 9.30 horas. El proyecto a nivel local fue solicitado por la Asociación Sociocultural Gitana Undebel Villela y el Ayuntamiento de Marbella, que aporta las instalaciones del centro cívico donde se desarrollan labores educativas de refuerzo, personal y algunos medios para el desarrollo del campamento. Por ejemplo, el pasado viernes, el Consistorio puso a disposición de los menores un autobús para que disfrutaran de un día de ocio en el parque acuático de Torremolinos.

¿Qué cubre entonces la subvención de la Junta de Andalucía? Con los 31.571 euros de ayuda se hace frente a los seguros de responsabilidad civil, el material fungible para las actividades que desarollan los menores, la compra de productos y condimentos para elaborar la comida y la contratación del personal.

Los menús tienen unos nutrientes muy estudiados. La comida más importante es la de mediodía que se sirve a las dos de la tarde y consta de un plato principal a base de legumbres y verduras; un segundo de pasta, carne o pescado; y frutas como postre. Hoy comerán lentejas, pollo con ensalada y melón.

La subvención se cobra tarde

Este año la comida se cocina en el propio colegio, un cambio importante respecto al año anterior, cuando el servicio lo prestaba un catering que traía los alimentos desde Málaga. El equipo responsable de la escuela de verano de Las Albarizas ha adaptado las instalaciones del centro donde se manipulan los alimentos de la línea fría que se sirven durante el resto del año. Los responsables del proyecto a nivel local han optado por este modelo para ahorrar costes, puesto que toda empresa de catering, por muy barata que sea, busca un beneficio industrial que no existe para los impulsores que sólo tendrán que cuadrar las cuentas con respecto a la subvención otorgada. No obstante, luchan contra un problema grave. La asociación Undebel Villela no tiene recursos económicos y la ayuda de la Junta la cobrará mucho después de que se haya invertido el dinero. Por ejemplo, el año pasado la subvención se cobró el 5 de diciembre. La buena voluntad de los proveedores y la astucia del equipo responsable del campamento garantizan mientras tanto su viabilidad.

El otro gran escollo es que el programa sólo garantiza las tres comidas diarias de lunes a viernes, aunque como contrapartida es totalmente gratuito para las familias. El colegio pone a disposición la cocina, el comedor y dos aulas para refuerzo escolar, a las que se suman las instalaciones del centro cívico.

La escuela de verano de Las Albarizas ha recibido hasta el momento 104 solicitudes, pese a que sólo oferta 80 plazas. No obstante, el plazo de inscripción estará permanentemente abierto porque los responsables cuentan siempre con la posibilidad de que queden vacantes en algún momento.

Un porcentaje alto de los niños que se benefician de la apertura de esta escuela de verano son de etnia gitana o inmigrantes de Las Albarizas o alrededores. Todos ellos, pertenecientes a familias con graves apuros económicos o en riesgo de exclusión social. «Se trata de normalizar el día a día de los niños y que no estén todas las vacaciones en la calle sin nada que hacer», indica Juan Antonio Guzmán, educador social de los Servicios Sociales Comunitarios del Ayuntamiento de Marbella. «El objetivo del campamento además de la garantía alimentaria – continúa este especialista del Equipo de Intervención Familiar – es que los niños tengan unas actividades controladas para que estén haciendo algo positivo y eviten situaciones de riesgo».

Refuerzo

La de Las Albarizas es una de las 11 escuelas de verano con comedor que se desarrollan en la provincia al amparo de la Junta. Concretamente, se desarrollan en los municipios de Málaga, Vélez y Ronda, convirtiéndose en la provincia andaluza con mayor número de colegios que atiende las tres comidas diarias durante el verano y la que dispone de más presupuesto para poder satisfacerlas, 290.000 euros.

Por otra parte, hoy comenzará a funcionar la escuela de verano con comedor anunciada hace escasas fechas por el Ayuntamiento de Marbella tras cerrar un acuerdo con Fuerte Nagüeles. El proyecto arrancará con medio centenar de menores de entre 4 y 15 años, seleccionados por el equipo de Infancia y Familia del Consistorio. La escuela, subvencionada con 15.000 euros que salen de las arcas municipales, cerrará a finales de agosto y garantizará actividades lúdicas como la de la Junta, que comenzó a funcionar el pasado lunes.