JAVIER G. GALLEGO BRUSELAS CORRESPONSAL

Farage ‘engorda’ a costa de Le Pen

El Partido de la Independencia británico (Ukip) consigue formar grupo propio en la Eurocámara gracias a una tránsfuga del Frente Nacional descontenta con su líder

El Mundo, , 19-06-2014

En la carrera que mantenían los euroescépticos por formar un grupo parlamentario en el hemiciclo de la Eurocámara, el británico Nigel Farage ha llegado el primero. Y lo ha hecho, además, golpeando donde más duele a su contrincante política, la radical de extrema derecha Marine Le Pen, a quien ha robado una eurodiputada de sus filas para conseguir cumplir con los requisitos mínimos que establecen las reglas del Parlamento Europeo.

La tránsfuga que ha permitido el acuerdo es Joëlle Bergeron, una de los 40 diputados del Frente Nacional francés que obtuvo asiento en la Eurocámara en las elecciones de 25 de mayo. Sus desencuentros con Le Pen se habían agrandado en las últimas semanas y parecían insalvables en una cuestión clave dentro del planteamiento ideológico de la extrema derecha francesa: Bergeron, a diferencia de su jefa de filas, sí está a favor de que los inmigrantes puedan votar en las elecciones locales de Francia.

La salida de esta eurodiputada del Frente Nacional no suponía, en principio, un serio contratiempo para Marine Le Pen, a quien le sobran escaños para salvar el mínimo de 25 diputados que requieren las reglas del Parlamento Europeo. El problema de la radical francesa llega a la hora de cumplir con el otro requisito necesario: formar un grupo con partidos procedentes de, al menos, siete Estados miembros de la UE.

Ese mismo problema era el que tenía el otro gran líder del bloque euroescéptico, el presidente del partido de la Independencia británico (Ukip). Nigel Farage, que hasta el momento sólo había conseguido sumar a su grupo, Europa por la Libertad y la Democracia (EFD), partidos de seis países diferentes. Finamente, la entrada de Joëlle Bergeron aporta un Estado miembro más, Francia, por lo que cumple con las exigencias de la Eurocámara para poner en marcha su propio grupo.

Así las cosas, el nuevo EFD tendrá 48 eurodiputados procedentes de siete países. Los británicos de UKIP son los que más asientos aportan, con 24, mientras que el Movimiento 5 Estrellas, del italiano Beppe Grillo, sumará otros 17. A partir de ahí, los otros representantes aparecen como decisivos porque, aunque no aportan cantidad, sí ofrecen la exigida diversidad de delegaciones nacionales. Los demócratas suecos aportan dos escaños; los lituanos de Orden y Justicia, otros dos; mientras que el Partido de los Ciudadanos checo, La Unión de Granjeros lituana y la tránsfuga del FN francés suman uno cada uno.

«Estoy muy orgulloso de haber formado este grupo, con el que estaremos en la primera línea trabajando para restaurar la libertad, la vuelta a las democracias nacionales y devolver a nuestros respectivos países el control de nuestro destino», señaló en un comunicado Farage.

Quien puede tener más problemas para formar un grupo es Le Pen, quien sigue negociando para sumar a su causa al menos otros seis partidos de seis países de la UE distintos. La llamada Alianza Europea por la Libertad, como se denominará su grupo si consigue el apoyo suficiente, cuenta de momento con sólo cinco partidos y está teniendo problemas para sumar los otros dos necesarios. De momento, junto al Frente Nacional permanecen el Partido de la Libertad (PVV) holandés de Geert Wilders, el Vlaams Belang belga, la Liga Norte italiana y el FPÖ austriaco.

La imagen antisemita del partido de Marine Le Pen ha podido hacerle perder socios potenciales en el Parlamento Europeo.

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)