El colctivo SOS Racismo de Vitoria, por boca de su portavoz, Fede García, ha reconocido este martes que “lógicamente nadie se debe bañar con ropa de calle en la piscina por temas higiénicos”, sin embargo, cree “exagerada la polémica que se ha generado”. El activista vitoriano ve una intencionalidad en el tratamiento que se ha hecho del caso ya que en la polémica foto “no se ve a una persona que va a hacer largos vestida con un burka. Es una una madre, con velo, que está cuidando de su hijo cerca del borde de la piscina”.

SOS Racismo de Vitoria ha denunciado la “clara intencionalidad” del alcalde, Javier Maroto, de marginar a la población musulmana al prohibir bañarse en las piscinas municipales con vestidos de calle y velo, gesto con el que también busca “votos y rentabilidad política”.

La imagen que la desatado la polémica.
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El portavoz de esta asociación, Fede García, ha dicho a Efe que las mujeres musulmanas que se han bañado vestidas con velo en las piscinas de Gamarra de la capital alavesa tienen carné “igual que los demás” y entraron a la pileta infantil, de medio metro de profundidad, para cuidar a menores. Ha destacado que defender la higiene en estas instalaciones es necesario, pero las normas deben aplicarse a todos y a su juicio es mucho menos higiénico que entre un joven que ha corrido descalzo sin lavarse los pies que lo haga una mujer musulmana vestida.
“Si no va a permitir a una madre que cuide de sus hijos en las piscinas municipales, ponga usted personal municipal a realizar esa tareas”

Más claro ha hablado la marroquí Zineb Berrouho, afincada en Vitoria y colaboradora de Sos Racismo. “Claro que nadie se puede bañar con toda la mierda de la calle”, reconoce. Eso sí, en la misma línea que García aduce que no es una persona bañándose. “Es una madre cuidando de un su hijo”. En declaraciones a la televisión pública vasca, Berrouho explica desde la óptica de la comunidad aludida por las fotografías publicadas que “la alternativa si esto no se permite es que ese niño tenga que pasarse todo el verano sin poder disfrutar de la piscina”. Por ello, Zineb ha reclamado, directamente a Maroto que “si no va a permitir a una madre que cuide de sus hijos en las piscinas municipales, ponga usted personal municipal a realizar esa tareas. Deje de meterse en la vida de las personas”.

Interpretaciones al margen, García ha pedido al alcalde de Vitoria, Javier Maroto, que “se ocupe de las cosas importantes para la ciudadanía y que se deje de monsergas”. “No es razonable mezclar el velo con la higiene personal. Uno puede ir sin ropa y no estar limpio porque no se ha duchado en un mes”.