El Colegio Público de Paradai no tiene director desde principios de mes. Las funciones inherentes al cargo las está desempeñando la jefa de estudios, después de que Educación aplicara la sanción disciplinaria impuesta a José Antonio Díaz Escolante, de cuatro meses sin empleo y sueldo. La Xunta abrió expediente disciplinario al docente, supuestamente porque se negó a acatar las órdenes de la comisión de escolarización de dar entrada en el centro a niños inmigrantes y de la comunidad gitana asentada en Lugo.

Fuentes de la administración confirmaron que Díaz Escolante está cumpliendo la sanción. No quisieron informar sobre los motivos que originaron el expediente en aras, según expusieron, de mantener la confidencialidad de este asunto.

Las reticencias a facilitar información sobre las razones del expediente dan pie a especular con la posibilidad de que la razón de esta medida disciplinaria no esté relacionada únicamente con la comisión de escolarización. Díaz Escolante podría tener otra investigación abierta, en este caso en el ámbito judicial y derivada de la denuncia de los padres de un alumno del centro, que ya no acude a él desde hace varios meses.

El cumplimiento de la sanción, recurrida por Escolante por la vía contenciosa, finalizaría en el mes de agosto, justo coincidiendo con el inicio del nuevo curso escolar. Esta circunstancia, según fuentes de la administración, podría variar en función de la resolución del recurso.

Despacho cerrado

La administración confirmó que las funciones de dirección las asumió, según marca la normativa en vigor, la jefa de estudios del centro.

Escolante dejó de ir al Colegio de Paradai a principios de mes y las persianas de su despacho permanecen cerradas desde entonces. Educación no dio ningún tipo de explicaciones a los padres de la comunidad educativa del centro sobre el expediente incoado a Díaz Escolante, ni cuando lo abrió, ni cuando aplicó la sanción.

El ANPA tiene obligación de reunirse todos los meses y es probable que el asunto sea abordado en la reunión prevista para mayo.

Educación tampoco comunicó nada a la junta de personal. La única noticia que recibió este órgano de representación es que había abierto un único expediente, sin especificar las causas.

El director del colegio público de Paradai, que compaginó en una etapa esta función con la de concejal del PP en el Ayuntamiento de Lugo, fue desde el inicio una persona muy conflictiva, que se enfrentó directamente a una amplia parte de la comunidad educativa.

Enfrentamiento

La comisión de escolarización, a la que supuestamente se enfrentó el director de Paradai sancionado, tiene encomendada la misión de repartir por los centros de Lugo a aquellos niños que se incorporan con el curso empezado. La mayor parte de ellos son inmigrantes y de la comunidad gitana.

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