Los flujos migratorios de África occidental no cesarán mientras existan causas por las que huir y, en este sentido, Marruecos seguirá siendo el país de tránsito de miles de personas que huyen de la pobreza, las pandemias, los conflictos étnicos y las guerras. El destino es Europa y las vías de entrada, Ceuta y Melilla. Como la gran mayoría no puede permitirse la tarifa de la mafia para entrar, por ejemplo, parapetado en un maletero, la mejor opción es saltando la verja o cruzando a nado. Todos coinciden en los mismo: prefieren la muerte a no intentarlo.

SMITH (CAMERÚN)

Tres años en la clandestinidad

Desde hace tres años el joven

Smith, de Camerún, vagabundea por las cal…