El informe preliminar realizado por la policía científica de los Mossos d’Esquadra descarta que el fuego que acabó con la vida de los cuatro menores en el barrio de los Pisos Planas de El Vendrell se originase en la instalación eléctrica de la vivienda. Descartado el cortocircuito, los investigadores sostienen que fue una fuente de fuego directa la que provocó el trágico incendio y así se ha hecho constar en el informe entregado al juzgado de El Vendrell que investiga el caso. Una vela o un cigarrillo mal apagado aparecen por ahora como la hipótesis más probable de la causa del fuego, que se originó en el comedor del inmueble, en la cuarta planta del número 4 de la calle del Mig de El Vendrell, y se propagó con virulencia y rapidez.
“La causa más probable es la llama directa sobre un material inflamable, causada per una vela o una colilla”, reveló ayer el delegado de la Generalitat en Tarragona, Joaquim Nin. El informe definitivo de la policía científica no estará terminado hasta la próxima semana, ya que el estado en el que quedó la vivienda, totalmente calcinada, está dificultando la labor de los investigadores. No puede descartarse aún que la llama que acabó prendiendo el piso se originase en un brasero, aunque por ahora la policía no ha localizado en la vivienda restos de metal calcinado.
En el comedor de la vivienda, de 60 metros cuadrados y tres habitaciones, había una gran cantidad de material inflamable, según explicó el delegado. Las mantas, que la familia utilizaba para protegerse del frío, y las bolsas de plástico ayudaron a propagar el incendio. La apertura del balcón, por donde consiguió escapar el hijo mayor del fuego, propició la entrada de oxígeno y contribuyó también a incrementar la virulencia del fuego.
La policía científica estuvo durante toda la mañana de ayer inspeccionando de nuevo el piso, después de que el miércoles ya estuvieran los investigadores recogiendo las primeras pruebas.
Los cuatro hermanos, de edades comprendidas entre los 3 y los 12 años, fallecieron en sus camas por inhalación de monóxido de carbono, por la gran cantidad de humo que se acumuló en la habitación, según ha revelado el resultado de la autopsia. El padre, la madre y la niña de dos años que se salvaron en el incendio siguen ingresados en la unidad de quemados de la Vall d’Hebron. Su evolución es favorable y no se teme por su vida. El padre, que sufrió quemaduras de segundo
grado en el 11% del cuerpo, no resultó afectado por la inhalación de humo. El hijo mayor, de 18 años, y su primo, de 26, que pudieron escapar de las llamas, ya fueron dados de alta pocas horas después de producirse la tragedia.
El Vendrell seguirá hoy recordando a las víctimas con una concentración silenciosa convocada este mediodía por la escuela Teresina Martorell, donde iban a clase los fallecidos, en la plaza Vella. Se guardaran cuatro minutos de silencio en memoria de los cuatro niños. Está previsto que alumnos de la escuela lean algunos textos para rendir su particular homenaje a la familia.