Los Gobiernos autónomos de Melilla y Ceuta inician este miércoles un encuentro para tratar la presión migratoria que sufren ambas ciudades por ser frontera con Marruecos. La reunión se celebra en la primera de las dos ciudades y, como adelantó el presidente de Melilla, Juan José Imbroda, pretende exigir a la Unión Europea mayor implicación en un problema que afecta seriamente a las dos ciudades, pese a no ser su responsabilidad.

La delegación ceutí estará encabezada por su presidente, Juan Jesús Vivas, que llegará a Melilla sobre las cinco y media de la tarde, junto a los consejeros de Presidencia, Yolanda Bel; de Sanidad, Hakim Abdeselam, y del jefe de su gabinete, Luis Márquez.

Serán recibidos en el aeropuerto por Imbroda, al que le acompañará la consejera de Bienestar Social, María Antonia Garbín, y el de Seguridad Ciudadana, Francisco Calderón. Tras el saludo a las primeras autoridades melillenses y a los miembros de la Asamblea, se mantendrá una reunión con los miembros del Consejo de Gobierno.

El jueves, los representantes de los dos Ejecutivos visitarán el perímetro fronterizo de Melilla a partir del mediodía. Después, los dos presidentes autonómicos ofrecerán una rueda de prensa.