Las fuerzas de seguridad no quieren dar tregua a la actividad de las llamadas bandas latinas violentas. Esta vez le ha tocado el turno a la mara salvatrucha 13, un grupo criminal muy activo en América Latina y que se asentó en España con la llegada de la primera década del siglo XXI. Aunque el operativo policial ha sido coordinado por un juzgado de Alicante, aproximadamente la mitad de los arrestados por su pertenencia a la banda –algunos menores– se dieron ayer en Catalunya, principalmente en Barcelona y poblaciones del área metropolitana, pero también en Tarragona y Girona. El resto de los detenidos por la Guardia Civil lo fueron en Alicante y Madrid.

JORDI ROVIRALTA Uno de los detenidos ayer en el barrio del Guinardó de Barcelona

En Catalunya, se practicaron ayer 14 entradas y registros y a última hora se habían cubierto la práctica totalidad de los objetivos. Quedaba una persona por detener que no se encontraba en su domicilio como se creía inicialmente. Los investigadores estaban ayer empezando a analizar los ordenadores y documentación intervenida y estudiando las armas incautadas, que inicialmente parecían simuladas. A pesar del férreo secreto del sumario, se sabe que una de las acusaciones por las que se persigue a los miembros es por la de grupo criminal, aunque se sabe que protagonizan tráfico de drogas, palizas y tenencia de armas. La investigación lleva meses abierta y se han hecho decenas de seguimientos y escuchas telefónicas.

La llegada con fuerza de la MS13 a Catalunya se produjo el 2007. Se asentó en las ciudades de Girona y Barcelona. Fue en esta segunda capital donde mantuvieron en el 2011 una dura batalla pandillera con los latin kings por el control de zonas como es el Eixample. Querían hacerse un hueco. Se produjeron numerosos apuñalamientos graves.