Melilla
Imbroda, contrario a que Melilla solo se conozca como «la ciudad de la valla»
Diario Sur, , 20-03-2014El presidente del Gobierno melillense, Juan José Imbroda, se ha mostrado contrario a que Melilla únicamente se conozca como «la ciudad de la valla» debido a las fuerte presión migratoria que se viene registrando y que provoca entradas masivas de subsaharianos.
En declaraciones a los periodistas, Imbroda insistió en que su postura y la de su Gobierno no está en contra de los inmigrantes, sino de la inmigración irregular que, en muchos casos, provoca heridos y muertos, al tiempo que condena a los que buscan un mundo mejor a vivir explotados.
Inmigración regulada
Para el presidente melillense, es necesario apostar por una inmigración regulada, para que aquellos que quieren unas mejores condiciones y una mayor libertad puedan alcanzar ese objetivo «de verdad».
Destacó la implicación de la ciudad autónoma y del Gobierno central para que, una vez que acceden a Melilla, estas personas cuenten con una atención que cubra todas sus necesidades.
Según Imbroda, durante la jornada del martes, tras la entrada a Melilla de unos 500 subsaharianos, tuvo la oportunidad de hablar con el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, hasta en tres ocasiones, y una cuarta lo hizo con el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez.
Ambos informaron a Imbroda del refuerzo de las plantillas de la Policía Nacional y de la Guardia Civil, con unos 120 agentes más, dedicados al control fronterizo y que se suman a otros que ya llevaban un tiempo en la ciudad.
«Hacía falta reforzar ese perímetro fronterizo porque Melilla y España no pueden dar la imagen que está dando la frontera, que está atacando la imagen de la ciudad y de España, y eso no puede ser», dijo el presidente melillense.
Según Imbroda, con las entradas masivas por la valla «se está violentando nuestra soberanía», por lo que ha aplaudido el envío a la ciudad de un total de unos 300 agentes de Policía Nacional y Guardia Civil de refuerzo, que se suman a las plantillas habituales.
(Puede haber caducado)