El casco histórico de Toledo forma parte de un proyecto del Movimiento por la Paz, el Desarme y la Libertad (MPDL) destinado a mejorar la convivencia con los inmigrantes, que en este barrio toledano son 1.645 personas, el 15 por ciento de su población total.

El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, y la presidenta del MPDL, Francisca Sauquillo, presentaron ayer este proyecto conjunto que incluye una primera fase de diagnóstico de la situación antes de iniciar actividades de sensibilización y realizar una guía de servicios, informó Efe.

Según García-Page, la población inmigrante en el Casco Histórico son 1.645 personas, el 15 por ciento de todos sus vecinos. Mayoritariamente proceden de Marruecos y América Latina, aunque hay extranjeros de numerosas nacionalidades, incluidos europeos y estadounidenses, entre otros.

Sauquillo explicó que este proyecto se ha puesto en marcha en Toledo, Almería y Madrid, y cuenta con financiación del Ministerio y del Fondo Europeo de Colaboración.
Salir del gueto

El programa quiere contar con la colaboración de la población inmigrantes y de los colectivos que trabajan con ellos y, en particular, desarrollará acciones en zonas públicas, como parques y centros de salud, a los que suelen acudir.

Este proyecto de mediación comunitaria persigue que el inmigrante pero también el ciudadano autóctono «salgan de su gueto» y se relacionen, con especial insistencia con las mujeres que en muchas ocasiones tienen más dificultades para relacionarse.

Francisca Sauquillo resaltó que «cerca» de las elecciones europeas este programa puede ser «un ejemplo» para otros lugares en cuanto a evitar la xenofobia, el racismo y las desigualdades. Por su parte, el alcalde agradeció al MPDL que haya escogido Toledo para este proyecto pionero y advirtió sobre la «brecha de la desigualdad» que cada vez va siendo mayor en la sociedad española.