«En 2008 celebramos en Zumaia un congreso sobre microhilos y el Ayuntamiento nos dio muchas facilidades, por eso quiero aprovechar la oportunidad para agradecérselo», afirma Alexander Chizhik, que interrumpe el curso normal de la entrevista para recalcar su condición de vecino de Zumaia. «Es un buen sitio, para mí el mejor de la costa vasca, yo soy zumaiarra».

Él, que ha conocido los sinsabores de la emigración, recuerda que en Euskadi «vivimos desde hace un montón de años rusos, ucranianos y moldavos, y estamos incorporados a la cultura vasca». «No somos sosos, hacemos fiestas, vamos a las sidrerías y celebramos también los carnavales de nuestra patria», dice.