Los encuentros y los debates políticos son en si mismos un hecho contradictorio. Mucho más, sin ningún género de duda,

si los protagonizan las personas que están llamadas a ser los representantes de los ciudadanos en las instituciones en un futuro no muy lejano. Participar en un encuentro con los integrantes de las organizaciones juveniles de los partidos es una especie de viaje en el tiempo, convenientemente actualizado y algo mejorado, que reproduce viejos esquemas, discursos y planteamientos. Y una máxima incuestionable: la maquinaria del aparato – sea partido, asamblea, coalicción o amalgama de siglas – acaba por hacer uniforme el discurso de sus militantes.

Con todo, la experiencia es enriquecedora y positiva. Los jóvenes ourensanos tienen inquietudes sociales, se implican en el trabajo político y comparten deseos, objetivos y el compromiso de mejorar una provincia, la suya, que sigue en el secular camino de salir del vagón de cola de casi todo.

Del empleo al idioma

La crisis, en el caso de la provincia de Ourense la eterna crisis, sigue ejerciendo como protagonista indiscutible de las inquietudes de los jóvenes políticos ourensanos: la falta de oportunidades preocupa a los representantes más jóvenes de Anova, Galiza Nova, Xuventudes Socialistas y Novas Xeracións. La emigración a la que se ven obligados los miembros de las generaciones más formadas de la provincia los enerva, lo mismo que la falta de compromiso estatal y autonómico con la industrialización de Ourense. El idioma, la identidad cultural, la lucha contra la desafección política y la necesidad de una reformulación en la representación en las instituciones y el compromiso ético en las mismas son aspectos que marcan sus discursos.

diego conde

Anova. La ilusión que otorga una nueva marca política, de brillante resultado inicial, impregna su discurso. El escaso recorrido de la formación le vacuna contra posibles reproches de sus contertulios. Las contradiciones son las propias de su partido: se cita de pasada el caso de Carmen Iglesias Sueiro y como ejemplo de gestión se alude al alcalde de Manzaneda – que no se presentó por Anova, sino bajo las siglas del BNG – .

fabián freijedo

Galiza Nova. El discurso identitario y la apuesta del BNG por la soberanía marcan sus intervenciones. El comportamiento de los nacionalistas, con la dimisión de sus representantes imputados, le sirve para dejar en evidencia a socialistas y populares en lo que a ética política se refiere.

josé antonio nóvoa

Xuventudes Socialistas. La seguridad de un argumentario políticamente correcto le otorga cofianza, cercanía y populismo. Las estructuras de partido le dejan atado – los jóvenes socialistas protestan, aunque pueda ser que no les escuchen todo lo que debieran – , lo mismo que las luchas internas – ni paquista ni pachista, que haya unidad – y las imputaciones.

josé antonio estévez

Novas Xeracións. La discreción en sus intervenciones y la táctica de ir a la contra para defenderse de los planteamientos de sus contertulios – con referencias a los enchufados del PSOE y al papel del BNG en Ourense – marcaron su participación.

Coincidencia en la necesidad de dinamizar el tejido industrial de la provincia

Apuesta por el cambio de modelo para superar el desapego político