Un joven inmigrante ha sido rescatado del interior de una balsa de riego a la que había caído cuando circulaba en bicicleta por el término municipal de Vícar. Al parecer, la víctima y un compatriota al ser de noche no vieron el muro de la alberca. Uno de ellos cayó al agua y el otro quedó tendido en el suelo en estado de inconsciencia.

Los hechos tuvieron lugar sobre las 0.30 horas de este miércoles, cuando agentes de la Guardia Civil son alertados por la Policía Local de Vícar de la presencia de una persona tendida sobre la calzada, junto a un bicicleta, en la carretera del Butano al Bobar.

A su llegada, los efectivos de la Benemérita hallaron a este individuo. Se encontraba inconsciente, por lo que son requeridos los servicios médicos para que le auxilien. Mientas aguardan la llegada de la ambulancia, los agentes deciden inspeccionar la zona y encuentran otra bicicleta a unos 20 metros de distancia.

Al acercarse a ella, escuchan ruidos en una balsa de riego. Ante la posibilidad de que pudiera tratarse de otra persona, deciden aproximar el coche patrulla para iluminar la alberca. En su interior hay una persona que se esfuerza por mantenerse a flote. Pero no lo consigue y se va al fondo.

Uno de los guardias civiles coge por los pies a su compañero y éste se introduce en el agua. Consigue localizar a la víctima y sacarla a la superficie, pero al haber casi un metro de altura entre el filo de la balsa y la línea de agua no pueden extraerla. Optan por esperar la llegada de otra dotación policial, lo que permitió culminar el rescate.

El herido fue conducido en ambulancia hasta el Hospital de Poniente, en El Ejido, con síntomas de hipotermia. Además, uno de los agentes de la Guardia Civil tuvo que ser asistido en el mismo centro sanitario de los numerosos traumatismos que presentaba. El otro inmigrante consiguió recuperarse y abandonó el lugar por sus propios medios.