La Unión de Guardias Civiles (UniónGC) ha presentado una querella en la Audiencia Nacional contra la comisaria de Interior de la Unión Europea, Cecilia Malmström, por un delito de calumnias e injurias en la muerte de 15 inmigrantes en Ceuta. Los denunciantes le acusan de imputar a los agentes un crimen tan grave como el de homicidio por imprudencia al afirmar que “no se les apuntó directamente, pero ello creó tal pánico que 15 personas se ahogaron”.

La querella asegura que la comisaria pudo haber rectificado o, en su caso, matizado o desmentido a los medios, si consideraba que no recogían fielmente sus declaraciones. Sin embargo, optó por mantenerse en silencio, dando por buenas unas declaraciones que no han hecho otra cosa que generar desasosiego entre los guardias civiles, “dar alas a quienes nos pretenden acusar a toda costa y generar inquietud en la opinión pública”.

Por ello, los querellantes creen que existe un menoscabo a la Guardia Civil y a sus miembros y más gravoso, si cabe, la insinuación infundada e irreal en todos sus extremos, sugiriendo que la actuación de los agentes ha sido una de las causas de las muertes de los inmigrantes.

En definitiva, dicen los querellantes, “nuestro mensaje a Malsmtröm es claro: no hemos matado a nadie. Quienes estaban en aguas españolas llegaron vivos a nuestra costa. Los que tuvieron la desgracia de morir lo hicieron en territorio marroquí. No somos racistas. Tampoco asesinos. Salvamos vidas diariamente y Malsmtröm opinó desde la ignorancia y con esa ignorancia nos ha humillado”, concluyen.