Cien inmigrantes logran entrar en Melilla en otro salto masivo de la valla

En el asalto participaron 500 personas, con actitud muy violenta, según la Guardia Civil

La Vanguardia, ADOLFO S. RUIZ , 25-02-2014
Por segundo lunes consecutivo centenares de inmigrantes subsaharianos protagonizaron ayer un nuevo salto masivo de la valla de seis metros de altura que separa Melilla de Marruecos. De los 500 que lo intentaron, al menos cien penetraron en la ciudad española. La delegación del Gobierno y las fuentes policiales destacan “la inusitada violencia empleada por los inmigrantes”. La Guardia Civil difundió casi inmediatamente tres vídeos del suceso.

REUTERS Las cámaras de la frontera de Melilla captaron el episodio de ayer

Los hechos se produjeron poco antes de las ocho de la mañana, con la primera luz del día, cuando el grupo avanzó sobre la valla armado de piedras y palos. Los gendarmes marroquíes tuvieron que retroceder y buscar refugio en el terreno que separa los dos cuerpos de alambrada de seis metros de altura, después de pedir a la Guardia Civil que abriese las puertas del vallado. En ese momento, los subsaharianos se dividieron e iniciaron la escalada de la doble valla por las zonas conocidas como Vaguada Linares y Río Nano.

A diferencia de lo ocurrido en Ceuta el pasado día 6, la Guardia Civil española difundió casi de inmediato tres vídeos para ilustrar las circunstancias en las que se produjo el salto. En las imágenes se aprecia cómo agentes españoles e inmigrantes intercambian el lanzamiento de objetos, probablemente piedras de gran tamaño. En el primer vídeo se ve a una hilera de personas que avanza junto a la valla hasta un punto; en el segundo se observa a varios vehículos de la Guardia Civil que comienzan a tomar posiciones; en el tercero, los subsaharianos trepan por la valla, doblan su parte superior y se deslizan sobre ella hasta alcanzar el segundo tramo.

El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, insistió ayer en que la actuación de la Guardia Civil en Ceuta y Melilla está siendo “ejemplar, dado que se enfrentan a unas situaciones muy complejas”. Fernández Díaz alabó también la cooperación de Marruecos para controlar este problema, y recordó que España “es frontera exterior de la UE y no puede hacer este esfuerzo sola”. “Lo primero que tienen que hacer los inmigrantes es cumplir la ley y entrar legalmente en España y no usando la fuerza”, insistió.

El intento de ayer se convirtió “en uno de los saltos con más heridos de los últimos que se han producido”, según fuentes de la Cruz Roja. Al menos treinta personas tuvieron que ser atendidas en el centro de estancia temporal de inmigrantes (CETI), la mitad por cortes producidos por la concertina y objetos punzantes de la valla, cuatro presentaban heridas profundas, y la otra mitad recibieron asistencia médica por contusiones o cuadros de malestar.

Ante la gravedad de la situación, el ejército instaló ayer dos tiendas modulares en el interior del CETI, que se suman a las cuatro que ya se habían colocado la semana pasada. Las instalaciones están previstas para acoger a unas 400 personas y en la actualidad hay más de mil en su interior. La unidad de logística militar trasladó también literas para unas cien personas. Fuentes de la Asociación Pro Derechos Humanos de Melilla atribuyen la repetición de estos saltos a la presión que están ejerciendo las fuerzas policiales marroquíes sobre el millar de personas que se encuentran escondidos en el monte Gurugú, cercano a Melilla.

En Ceuta, una patrullera marroquí detuvo ayer a dos inmigrantes, ambos subsaharianos, cuando pretendían alcanzar a nado la costa ceutí, después de haber iniciado una travesía desde las costas de Marruecos, según fuentes policiales.

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)