La presión migratoria se concentró en 2013, principalmente, en las dos ciudades autónomas del norte de África. El 57,7% de extranjeros que entró irregularmente en España el pasado año lo hizo por Ceuta y Melilla, según recoge el Balance Migratorio publicado este miércoles por la Asociación Pro-Derechos Humanos de Andalucía (Apdha). “Es el acceso más fácil que les queda”, apunta Carlos Arce, coordinador de Inmigración de la ONG, que explica este fenómeno por el aumento de la vigilancia marroquí para evitar la salida de pateras rumbo a la Península.

El documento se difunde apenas dos semanas después de la tragedia de Tarajal (Ceuta), donde murieron 15 subsaharianos, y tras revelarse las intenciones del Gobierno de Rajoy de modificar la Ley de Extranjería para permitir las devoluciones en caliente. Un estudio que, además, demuestra un cambio drástico en la presión migratoria que soportan las dos localidades. Porque, en 2013 ambas recibieron al 57,7% de quienes entraron irregularmente en España —4.354 personas de un total de 7.550—. Y, un año antes, este porcentaje era 16,8 puntos menor: representaba el 40,9% —2.861 de 6.992—.

“Existe una reacción desmedida y absolutamente brutal del Gobierno de España, ya que son unas cifras totalmente manejables por las fuerzas de seguridad de nuestro país”, ha recalcado Rafael Lara, coordinador del área de Solidaridad Internacional de Apdha. “Cada vez es más difícil pagar una plaza en una patera, porque la policía marroquí les quita el poco dinero que habían ahorrado. Así que tienen que buscar una salida más fácil y cercana”, añade Arce.

Existe una reacción desmedida y absolutamente brutal del Gobierno de España Rafael Lara, coordinador del área de Solidaridad de Apdha

Esta situación se traduce en más saltos en las vallas de Ceuta y Melilla, como recoge el Balance. Porque este método para llegar a territorio español fue utilizado por 1.189 inmigrantes en 2013, casi el 16% de todos los que accedieron al país. Cifras superiores a las de 2012, cuando 827 superaron la verja (11,8%). “El aumento del control de los agentes marroquíes está impidiendo la salida de grandes embarcaciones hacia la Península”, remarca Arce, que se basa en la caída del porcentaje de inmigrantes que entran en patera: pasó de un 69% en 2012 a un 45% el año pasado.

La Delegación del Gobierno de Melilla ya adelantó un incremento de la presión migratoria cuando anunció que se produjeron 28 saltos masivos a la valla en 2012; frente al único que hubo en 2011. Este contexto, sumado a los intentos de acceder a las dos ciudades autónomas durante estas últimas semanas, ha provocado que Ceuta y Melilla preparen una cumbre bilateral para abordar este problema y exigir ayuda a la Unión Europea.
Casi 100 inmigrantes menos muertos

El balance presentado este miércoles en Cádiz contabiliza casi 100 muertes menos en 2013. “Tememos que esta disminución sea solo porque hay un mayor número de muertes en sitios escondidos”, ha advertido Arce, que ha insistido en que esta cifra representa solo las defunciones constatadas por Apdha: 130 frente a las 225 del año anterior.

La causa del incremento de los fallecimientos responde también, según la ONG, a una “mayor presión” de las fuerzas de seguridad. “Los inmigrantes buscan lugares difícilmente controlables para intentar alcanzar la Península”, apostilla el coordinador de Apdha, que ha insistido en que la presión migratoria que sufre España es menor “que cualquier otro punto caliente de las fronteras europeas”. En el estudio presentado, se destaca que por Italia entran 36.000 inmigrantes; por la zona greco-turca, 20.000; y por Rumanía, 18.000.