El líder de la oposición, Alfredo Pérez Rubalcaba, exigió ayer a Mariano Rajoy y al ministro del Interior, Jorge Fernández, que respondan una pregunta concreta: «¿Les parece bien o mal que se disparara con material antidisturbios al mar cuando había personas tratando de llegar a la playa?» «Si les parece mal, tienen que depurar responsabilidades», aseguró. El PSOE ha pedido la dimisión del director general de la Guardia Civil y del delegado del Gobierno en Ceuta. Si les parece bien, deben acudir al Congreso a explicarlo.

Tanto el líder socialista como otros dirigentes de este partido insistieron en exigir toda la información sobre la tragedia de Ceuta y que se depuren responsabilidades, pero sin pedir la dimisión del ministro.

Rubalcaba consideró en una entrevista en la Cope que la actuación de la Guardia Civil cuando disparó es «imposible de defender». «15 personas han perdido la vida. Hubo una actuación de la Guardia Civil que alguien tiene que explicar», señaló.

El líder de la oposición reclamó también respuestas «por las mentiras muy gordas» del director de la Guardia Civil, que negó los disparos, confirmados después por el ministro. «Alguien dio una orden absolutamente equivocada. 15 personas se han ahogado presumiblemente delante de las Fuerzas de Seguridad. Se ha cometido un conjunto de errores y mentiras», añadió.

Tanto Rubalcaba como posteriormente la portavoz socialista en el Congreso, Soraya Rodríguez, desvincularon la tragedia de Ceuta de la Ley de Extranjería. Como llegó a asegurar la diputada, es «indecente» afirmar que lo que ocurrió en Ceuta fue «un incidente en aplicación» de esa norma, como recordó que dijo el viernes pasado la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría. Rodríguez acusó al Ejecutivo de buscar así «una forma de esconder su responsabilidad».
Por la mañana, Rubalcaba se tuvo que enfrentar a casi una rebelión interna en la reunión del Grupo Socialista. Él no estaba, pero hasta una quincena de diputados reclamaron a puerta cerrada votar a favor de una iniciativa de La Izquierda Plural (IU-ICV-CHA) que reclama la dimisión del ministro por estos hechos. La dirección del Grupo lo descartó. Tanto Soraya Rodríguez como el número dos en el Congreso, Eduardo Madina, dijeron que, de momento, se han pedido dos dimisiones y que aún es pronto para exigir la del ministro.

Entre las críticas que tuvieron que escuchar está la de que el PSOE está siendo «demasiado tibio» en un asunto de «extrema gravedad».

Entre los que reclamaron más dureza hubo diputados próximos a Carme Chacón como José María Barreda; críticos como Odón Elorza; ex ministros como José Blanco, pero también próximos a la dirección como Valeriano Gómez. Además, intervinieron los cabezas de lista del PSOE por Almería y Granada, próximos a la presidenta Susana Díaz.