Cerca de 150 inmigrantes subsaharianos lograron entrar ayer a las seis y media de la mañana a Melilla tras un nuevo asalto desde Marruecos, en el que participaron un total de 250 inmigrantes. Una portavoz de la delegación del Gobierno en el enclave español precisó que en la avalancha de la frontera, consistente en una triple valla de siete metros de altura, participaron sobre todo ciudadanos cameruneses. Cinco de los inmigrantes fueron atendidos en un hospital por «contusiones diversas y posible fractura en algún caso», y otros por golpes en el centro de internamiento de Melilla. Pero «en ningún caso» fueron tratados por cortes provocados por la alambrada del vallado. Las autoridades marroquíes añadieron por su parte que ocho ‘sin papeles’ más sufrieron lesiones y fueron brevemente hospitalizados en Nador. También señalaron que unos 60 inmigrantes ilegales fueron detenidos.
Gran parte de los subsaharianos se dirigieron hacia el Centro de Estancia Temporal (CETI), coreando cánticos y consignas de victoria. Una vez allí, tumbaron la verja de acceso de vehículos rodados al intentar entrar prácticamente al unísono al complejo.
Este asalto se produce tras el ocurrido el pasado 6 de febrero en Ceuta. Aquel día, al menos 15 inmigrantes murieron en un incidente con material antidisturbios. En un primer momento, la Guardia Civil sólo reconoció haber utilizado pelotas de goma en tierra pero no directamente contra los inmigrantes. Días después, el ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, admitió sin embargo que también se usaron cuando los subsaharianos estaban en el mar, aunque sólo de forma «disuasoria». Algunos inmigrantes afirmaron por el contrario que los agentes dispararon pelotas contra los que estaban en el agua y balines de plástico para reventar los flotadores a los que estaban agarrados algunos de ellos, que en su mayoría no sabían nadar.
Los Gobiernos de Melilla y Ceuta están cuadrando sus agendas para reunirse en una cumbre en la que se abordará el problema de la inmigración que están padeciendo las dos ciudades autónomas. El Ejecutivo melillense criticó ayer mismo la «nula implicación» de la UE ante este fenómeno migratorio. La Unión Federal de Policí pidió ayer mayor implicación de la Agencia Europa de Gestión de Fronteras (Frontex) y colaboración con Marruecos para hacer frente a la «brutal» presión.