Tras casi 40 años de democracia, yo no tengo la menor duda del enorme, eficiente, honrado y necesario trabajo que la Guardia Civil realiza, a los resultados me remito. Creo que esa Guardia Civil oscura y terrible asociada al “tricornio” y ligada a un régimen opresor pasó hace tiempo afortunadamente a la historia. No entiendo por qué necesitamos que esté militarizada, pero ese es otro cuento. Con seguridad, como en todas las casas, dentro de ese cuerpo, cuecen habas y habrá sin duda quien haga de su capa un sayo. Eso es difícilmente evitable, y al ser detectado debe de ser perseguido y castigado.

Hecha esta aclaración, tengo que declarar que me siento muy, pero que muy indignado con lo que ha ocurrido en Ceuta y cuyo resultado todos conocemos, ni más ni menos que 14 muertos. Seguro que los inmigrantes no han tenido una actuación ni cívica ni educada en su asalto a la frontera. La palabra asalto y la palabra civismo se mezclan con dificultad. Ellos, los inmigrantes, pueden saltarse la ley si así lo deciden y sufrir por tanto las consecuencias de tal acción. Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, nunca, repito, nunca pueden saltarse esa ley y su actuación no puede encontrar jamás excusas para hacerlo. Eso es un pilar básico de nuestro Estado de derecho. Si lo han hecho deben de ser penalizados por ello.