Los inmigrantes de origen subsahariano que se encaramaron ayer a la valla de Melilla se han bajado finalmente de la misma tras permanecer en la parte alta durante casi seis horas.

Según informó la Delegación del Gobierno en una nota, inicialmente fueron nueve los inmigrantes que se subieron a la valla externa del perímetro, la del lado marroquí, pero cuatro de ellos abandonaron la verja con anterioridad.

Los cinco restantes permanecieron hasta las tres y media de la tarde, momento en el que decidieron «deponer su actitud de presión» y retornar a Marruecos, según la Delegación.

Cementerio musulmán

Durante casi seis horas, habían permanecido en la zona alta del vallado próximo al cementerio musulmán, el mismo lugar que en la madrugada registró un intento masivo de entrada protagonizado por unos 150 inmigrantes, ninguno de los cuales consiguió su objetivo.

En la zona donde permanecía el grupo subido a la valla, se desplegaron varias patrullas de la Guardia Civil, cuyos agentes trataron de evitar que los subsaharianos entraran a territorio español, pero que no podían actuar debido a que se encontraban en la zona del vallado que da a Marruecos, según explicó a Efe fuentes policiales.

La escena fue contemplada por un grupo de subsaharianos acogidos en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), algunos de los cuales animaba a sus compatriotas, quienes también respondían con gritos y signos de victoria.