Can Vies es uno de los centros sociales okupados con más historia de la ciudad. Uno de los resistentes. Nació en mayo de 1997 con un objetivo claro: dar respuesta a la falta de espacios para realizar actividades «tanto lúdicas como sociales y políticas» para la gente joven de Sants, déficit que, según aseguran sus impulsores, en estos 16 años no se ha solucionado. El espacio, propiedad de TMB, cuenta con un gran apoyo social en el barrio y sigue siendo el punto de encuentro de múltiples entidades tanto de Sants como del resto de la ciudad. Además de las muchas entidades y proyectos sociales que tienen Can Vies como sede, el local
–en el 42 de la calle de Jocs Florals, pegado al cajón de las vías del tren, de ahí su nombre– ha acogido la delegación de Sants de varias campañas de la ciudad. El centro participa de la Asamblea de Barrio de Sants, espacio de coordinación de diferentes movimientos, lo que ha hecho que Can Vies haya sido escenario de movilizaciones contra la ordenanza del civismo, campañas antirrepresivas y de apoyo a los presos de las distintas huelgas generales, así como de movilizaciones estudiantiles contra el plan Bolonia o asambleas del 15-M.
En Can Vies conviven dos proyectos: la parte de arriba del espacio es la vivienda, donde residen varias personas, y la de abajo es el «proyecto público», que se divide en dos espacios. Por un lado está el bar y las salas de reuniones, y por el otro está la antigua capilla, donde ensayan los bastoners de Sants. H. L.