La juez vincula la finca okupa de Can Vies con una ‘caza’ de ultras

Seis detenidos por el ataque el 12 de octubre en La Bordeta a un grupo de neonazis

El Mundo, JAVIER OMS / Barcelona, 30-01-2014

Los Mossos d’Esquadra culminaron
ayer una operación contra los
presuntos responsables de una
suerte de caza de ultraderechistas
vivida el pasado 12 de octubre en
Barcelona. El operativo, que comenzó
el martes por la tarde con la
detención de seis personas, se cerró
ayer con el registro durante
más de diez horas –desde las 6.40
hasta las 17.20– en el barrio de
Sants del emblemático edificio
okupado de Can Vies. Habría sido
desde éste, según sostienen tanto
los Mossos como la juez que instruye
el caso, desde el cual se habría
organizado el ataque a fascistas
aprovechando los actos que la
ultraderecha celebra en Barcelona
cada Día de la Fiesta Nacional.
Según el auto de registro de Can
Vies, la agresión de octubre fue orquestada
por «un grupo de entre
diez y 15 personas» que encapuchados
y «armados con barras, cadenas,
piedras y objetos contundentes
» atacaron a un grupo de
ocho neonazis que se encontraban
en la terraza de un bar en La Bordeta,
tras haber acudido a los actos
celebrados en Montjuïc y organizados
por la plataforma La España
en marcha.
Al ataque por el que los seis detenidos
están acusados de lesiones
y daños cabe sumar, asimismo, el
agravante de «motivación ideológica
evidente» que les atribuye la
magistrada y la Fiscalía de delitos
de odio. Según la juez, dicha motivación
quedaría reflejada tanto en
la elección de las víctimas –que lucían
símbolos ultraderechistas– como
por el grito que según los testigos
precedió el ataque: «Fachas de
mierda, os vamos a matar».
La juez justifica la irrupción ayer
de los Mossos en Can Vies –uno de
los símbolos del colectivo okupa
barcelonés desde hace 17 años–
porque en unas «grabaciones» policiales
realizadas el mismo 12 de
octubre se demostraría que el ataque
fue un plan preconcebido. La
magistrada descarta, así, que se
tratara de un encontronazo casual
entre grupos rivales –ultraderechistas
y antifascistas– en un día de
gran tensión política y con miembros
de ambos colectivos distribuidos
por toda la ciudad.
En dichas grabaciones aparecerían
al menos los seis arrestados,
quienes habrían organizado la emboscada
«dándose indicaciones de
la dirección que seguir», «adoptando
precauciones para intentar
ocultar rostros e indumentarias» y
acarreando palos, barras y piedras
con las que habrían ejecutado su
acción. Además, tres de los detenidos
habrían regresado a Can Vies
a buscar refugio tras un ataque
«contundente, rápido y dirigido».
Todo en conjunto supone para la
juez «una planificación y organización
del ataque» desde el interior
del edificio que obligó ayer a incautarse
de «objetos, instrumentos,
papeles y material informático» que pudiera vincular a los arrestados
con la agresión del grupo de
ultraderechistas. Al cierre de esta
edición no había trascendido el resultado
de dicho registro.
La juez también llama la atención
sobre los pinchazos telefónicos
a los que fueron sometidos los
investigados, los cuales los vincularían
con la Plataforma Antifascistas
de Barcelona. No obstante, se
limita a señalar en su escrito que
dicha organización «lleva a cabo
de forma habitual diferentes actos
culturales y lúdicos en Can Vies»,
seis de cuyos habitantes permanecieron
bajo custodia policial durante
el registro.
El despliegue de ayer de los
Mossos d’Esquadra, que activaron
a decenas de agentes y una veintena
de furgonetas de la Brigada Móvil
–antidisturbios– para el registro,
se llevó a cabo ayer entre protestas
de las plataforma vecinales de Can
Batlló y La Bordeta, simpatizantes
del colectivo okupa y antifascista,
así como del grupo parlamentario
de la CUP, uno de cuyos militantes
se encuentra entre los arrestados el
martes. La formación independentista
tachó el despliegue judicial y
policial de «auténtica provocación»
cuyo único objetivo era «propagandístico
».
Caber recordar que la agresión
cometida en La Bordeta, y que se
saldó con cuatro activistas neonazis
heridos, fue el único acto violento
de gravedad registrado el 12
de octubre. Meses antes, coincidiendo
con los actos de la Generalitat
el día de la Diada Nacional de
Cataluña, miembros del colectivo
La España en marcha – que engloba
cinco formaciones ultraderechistas,
desde Falange a Democracia
Nacional– agredieron a representantes
de formaciones políticas
catalanas en su sede en Madrid.
Varios de dichos agresores, detenidos
por la Policía Nacional tras el
ataque, encabezaron los actos ultraderechistas
de Barcelona del 12
de octubre.

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)