Un banquero inglés, tras recuperar su Porsche: «Por fin pude quitarme ese olor asqueroso del metro de Singapur»

El financiero inglés Anton Casey, obligado a usar el transporte público por una avería en su deportivo, despierta la indignación en Singapur

ABC, carmen calvo, 24-01-2014

Los desafortunados comentarios en Facebook de Anton Casey, un acaudalado banquero inglés, en los que decía que el metro de Singapur estaba lleno de gente pobre y maloliente han causado tanta polémica en el país que, incluso, el Ministro de Justicia, K. Shanmugan, ha tenido que intervenir.

“Como muchos singapurenses, me siento enfadado y ofendido por lo que ha escrito…Es profundamente ofensivo, equivocado e inaceptable…Tener dinero y un Porsche no hace a nadie superior” escribió el ministro en su página de Facebook.

Al parecer, Casey se vio obligado a usar el transporte público ya que su Porsche estaba estropeado. Al llegar a casa, publicó una foto de su hijo en la red social con el comentario “Papá ¿dónde está tu coche y quién es toda esta gente tan pobre?” Además, en otra foto, mostraba su Porsche plateado y bromeaba “Por fin he podido quitarme ese olor asqueroso del transporte público”.

Nadie sabe cómo unos comentarios privados salieron a la luz, pero, por el momento, el banquero, que está casado con Bernice Wong, antigua Miss Singapur, ha decidido esconderse durante unos días ante las amenazas recibidas y ha contratado a una agencia de relaciones públicas que ha pedido excusas en su nombre “Espero que me den una segunda oportunidad para volver a construir la confianza que la gente tenía en mí como residente de este maravilloso país”.
Su empresa tomará medidas

Crossinvest, el fondo de inversiones para el que trabaja, ha decidido investigar el asunto. El director de la compañía, Christophe Audergon, ha declarado que su empresa tiene consignas muy claras en relación con los códigos de conducta de sus empleados, incluso en las redes sociales, y que tomarán las acciones necesarias contra Casey. Singapur es un país donde conviven chinos, malayos, indios y occidentales y su gobierno castiga con firmeza comentarios o actitudes racistas en aras de preservar la armonía entre las distintas comunidades.

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