ESPAÑA EN EL 2009 Los nacimientos de padre y/o madre extranjera son un 24% y las bodas, un 19%
DIFERENCIAS DE GÉNERO El 60% de los matrimonios mixtos son entre un español y una mujer extranjera
EL CASO EUROPEO Los uniones mixtas en Italia son sólo un 5% del total y en Rusia superan el 14%

EJOSEP PLAYÀ MASET spaña vivió a principios del siglo XXI una llegada masiva de inmigrantes, casi sin precedentes en todo el planeta. Se pasó de los 637.000 inmigrantes de 1998 a los 5.6 millones del 2009 y se modificaron las pautas de natalidad y nupcialidad. Por un lado, el número de nacimientos de padre y/o madre extranjera creció del 5,6% al 24,1% y el número de matrimonios con al menos un cónyuge de nacionalidad extranjera aumentó de 10.411 (5,1% del total) a 37.788 (19,2%). El 80% de estos matrimonios tenía un cónyuge español y el otro extranjero, una circunstancia que hasta entonces tampoco era nada habitual. Si nos referimos sólo a estos matrimonios mixtos, había más de 28.000, un 14,5%.
La familia. Susanna y Donald, con sus dos hijos, junto a Corrie, el perro, también escocés

El estudio Revelaciones de una década de matrimonios entre españoles y extranjeros (1998-08), publicado por Joana Serret, Albert Esteve y Antonio López-Gay, del Centre d’Estudis Demogràfics de la UAB, en la revista Estadística Española, más allá de señalar este aumento de los matrimonios mixtos ahonda en las diferencias de perfil. En primer lugar detecta un mayor peso de las uniones entre nativos y mujeres extranjeras (60%) en todas las provincias españolas. En las áreas geográficas donde se dan pocos matrimonios mixtos, el número de hombres españoles que se casan con extranjeras supera claramente al de mujeres españolas que se casan con extranjeros. Es el caso de Teruel, con un el 83,1% de los matrimonios mixtos de nativos con extranjeras. En el extremo opuesto, está Tarragona, una de las provincias con más bodas mixtas, donde existe casi un equilibrio entre bodas de ambos sexos.

Otro aspecto a considerar es la edad. Los hombres que se casaron con extranjeras lo hicieron a una edad más avanzada y con mujeres más jóvenes que aquellos que se casaron con españolas. Aquí se apunta como explicación la llegada de generaciones con menos elementos y la tendencia de los hombres a casarse con mujeres de menos edad, lo que crea tensiones en el mercado matrimonial, tal como ya vaticinó hace unos años la demógrafa Anna Cabré. Eso explicaría que algunos hombres españoles busquen pareja entre las extranjeras si no la han encontrado entre las nativas. Otro factor a tener en cuenta es el aumento del nivel educativo de las mujeres y su incorporación al mercado de trabajo, lo que supone una mayor independencia y una menor propensión al matrimonio. Todo ello lleva a los autores a considerar que “las mujeres son muchos más selectivas en la elección del cónyuge extranjero que los hombres”.

Como conclusión final se señala que “la inmigración ha diversificado el mercado matrimonial de la misma forma que también lo hacen las nuevas tecnologías al ampliar el radio de potenciales cónyuges más allá del contexto inmediato”.

Este estudio se complementa con otro que la propia Joana Serret desarrolló juntó con Nadja Milewski, de la Universidad de Rostock, en el seminario ¿Quien se casa con quien? Pasado y presente, celebrado la semana pasada en Bellaterra (UAB) en el marco de los actos del 30 aniversario del Centre d’Estudis Demogràfics. Serret presentó una investigación comparativa sobre matrimonios mixtos en seis países europeos (Bélgica, Francia, Alemania, Italia, Noruega y Rusia). Los

trabajos sobre la formación de parejas en Europa coinciden en que se ha producido una disminución de los matrimonios, un incremento de las formas alternativas y un retraso tanto en la edad del matrimonio como del primer hijo. En paralelo, han aumentado las parejas mixtas. En los países analizados, Italia tenía la cifra más baja con sólo un 4,9%. Rusia tenía la más alta, con un 14,4%, lo que puede explicarse por los matrimonios con personas de antiguas repúblicas que antes formaban parte de la URSS. En España, con una cifra similar, debería tenerse en cuenta que parte de los matrimonios mixtos puede corresponder a una segunda generación de inmigrantes (hijos ya nacionalizados) que se casan con chicas jóvenes del país de origen de sus padres. En Catalunya, con porcentajes de matrimonios mixtos más elevados, se han dado casos de familias que buscan novias para sus hijos, incluso los nacidos aquí, en sus países de origen, ya sea en Pakistán, en familias conocidas, o en Marruecos, aprovechando un viaje.

El 70% de estas uniones mixtas son en forma de matrimonio. La edad de entrada en la unión matrimonial es superior en las parejas mixtas, pero más acentuada cuando el hombre es el nativo.