El documental ‘Balta Txuria, Balta Berdea. El rumor del Urumea’ de SOS Racismo se proyecta hoy en Biteri kultur etxea. Se trata de un audiovisual de una hora de duración que permitirá a los asistentes conocer aspectos relacionados con el asentamiento de personas rumanas que se encuentran junto al río Urumea, en la frontera entre Hernani y Astigarraga. El documental, realizado el año pasado, contará con un posterior coloquio donde participarán el alcalde de Astigarraga, Andoni Gartzia; una antigua vecina del asentamiento, Sorina Lunca; el miembro de SOS Racismo, Agustín Unzurrunzaga; y la responsable de Bienestar Social en Hernani, Gloria Mendinueta. La cita es a las 19.00 horas.

El documental recoge la experiencia del asentamiento de personas del Este de Europa de origen gitano en Astigarraga y Hernani, y el plan de intervención que se está desarrollando con las mismas. La entrada será libre.

Tras una recomendación del Ararteko y con la colaboración del Gobierno Vasco y la Diputación Foral de Gipuzkoa, en mayo de 2012 el Ayuntamiento de Astigarraga reconoce el asentamiento de población gitana rumana que hay en el municipio y empadrona a quienes allí viven. Una decisión tan polémica como novedosa, no exenta de rumores.

Se pone en marcha una intervención que llegará a 2017, fecha en la que se espera que no exista el campamento y sus habitantes hayan logrado la inserción social. Para participar de la intervención, los vecinos de Balta Txuria y Balta Berdea han de firmar un compromiso y cumplir con las condiciones establecidas en el mismo.

En el trabajo audiovisual que hoy se puede ver en Biteri se entrevista a 17 personas, entre las que están habitantes del propio asentamiento del Urumea, responsables institucionales del Gobierno Vasco, Diputación Foral, alcaldes de Astigarraga y Hernani, así como representantes locales de la iglesia, colegios y vecinos en general.

Tal y como señalan desde la dirección del documental, han entrevistado a habitantes rumanos «con el fin de recoger su opinión sobre el plan de intervención, sus costumbres… Era nuestro objetivo ponerles cara y nombre con el fin de humanizarlos y generar entendimiento y empatía». Hoy estarán en Hernani.