La canciller alemana, Angela Merkel, optó ayer por acallar el primer gran debate interno dentro del recién formado Gobierno de coalición mediante la creación de una comisión de miembros del Ejecutivo, que será la encargada de analizar posibles medidas en política de inmigración ante el miedo a una posible oleada de inmigrantes de los países más pobres de la Unión Europea.

Merkel acordó con el vicecanciller y jefe del Partido Socialdemócrata (SPD), Sigmar Gabriel, constituir un comité de secretarios de Estado para analizar medidas enfocadas hacia los inmigrantes y evitar así posibles fraudes al sistema social alemán.

La canciller ha tomado la iniciativa para tratar de devolver la calma al Ejecutivo cuando muchos de sus miembros, entre ellos la propia Merkel, no han regresado aún de las vacaciones de Navidad.

El comité estará formado probablemente por miembros de los ministerios de Exteriores, Interior, así como Trabajo y Asuntos Sociales y se constituirá en la reunión del próximo miércoles.

Sistema social

El temor a una posible oleada de «inmigración por pobreza» surge con motivo de la eliminación de las restricciones de movilidad a los trabajadores de Rumanía y Bulgaria el pasado 1 de enero. El debate en el seno del Gobierno se había convertido en una bomba de relojería, después de que la Unión Cristianosocial de Baviera (CSU), partido hermanado con la CDU de Merkel, propusiese en un documento varias medidas para restringir el acceso de los inmigrantes al sistema social germano.

Este documento, junto a unas explosivas declaraciones del jefe de la CSU, Horst Seehofer, provocaron airadas reacciones de sus socios del SPD. El ministro Frank-Walter Steinmeier y su secretario de Estado para Europa, Michael Roth, ambos socialdemócratas, calificaron la propuesta como peligrosa para Alemania y acusaron a Seehofer de «no entender lo que es Europa».

El debate continuó ayer con una batalla de intensas declaraciones que mostraban fuertes discrepancias, no sólo entre los partidos de la coalición, sino también en el propio partido de Angela Merkel. Además, el rotativo Bild ha iniciado una campaña que critica la llegada de nuevos inmigrantes al país.