200 sirios piden el mismo trato que la mujer que logró asilo

El Mundo, PAQUI SÁNCHEZ MELILLA ESPECIAL PARA EL MUNDO, 28-12-2013

El calvario burocrático de Manar Almustafa, la refugiada siria con el 90% de su cuerpo quemado por los efectos de la bomba que cayó sobre su casa en Homs, terminó ayer cuando cogió el barco que la llevó de Melilla a la Península. Dejó atrás la ciudad autónoma, en la que ha pasado los últimos dos meses atrapada y sin poder recibir asistencia sanitaria especializada, para abrir una nueva etapa en Barcelona junto a los 13 miembros de su familia a los que el Gobierno también ha concedido el asilo exprés.

Su caso no ha pasado desapercibido para nadie. Tampoco para los otros 200 sirios que, desde finales de julio, han ido llegando a Melilla tras escapar de la guerra que está asolando su país. Buena parte de ellos cogieron ayer sus maletas y dejaron el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) para acampar en la Plaza de España, donde están ubicadas las sedes de la Asamblea de la ciudad y la Delegación del Gobierno.

Familias enteras, entre las que había niños de todas las edades, fijaron su residencia en el corazón urbano de Melilla para dejar claro que ellos también quieren que se les trate de igual forma porque tienen el mismo problema que Manar Almustafa.

Mohamed, un padre de familia que llegó hace dos meses a Melilla con sus cuatro hijos y su mujer, se ha erigido en el portavoz de todos sus compatriotas al ser uno de los pocos que saben hablar español en el colectivo sirio, el segundo más numeroso del CETI. Viene también de Homs, como la familia Almustafa. «Tenemos el mismo problema, venimos del mismo pueblo», subraya este refugiado sirio al recordar que el conflicto ha ocasionado muchos problemas a todos los que allí viven o lo hacían hasta hace poco. Él, por ejemplo, se ha quedado sin casa, que está «en la tierra» por los bombardeos. Ahora tampoco tiene dinero porque se gastó 4.000 euros para que él y su familia pudieran entrar a Melilla con un pasaporte marroquí falso.

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)