Esta semana se ha puesto en marcha el curso de autoconstrucción que durante quince días se va a llevar a cabo en la zona del asentamiento rumano situado en la muga entre Hernani y Astigarraga. Los dos ayuntamientos participan de este proyecto, que se concreta por medio de la asociación Ekian y que está abierto a población no solamente rumana. Algo más de 30 personas están participando en este proyecto formativo, con la presencia de tres hernaniarras en el apartado de formación, dentro de ellos dos miembros de la brigada del Ayuntamiento del municipio.

Hay que recordar que el colectivo rumano que está en el asentamiento tiene de plazo hasta mayo de 2017 para buscar una salida a su situación actual. Existe un acuerdo con el Ayuntamiento de Astigarraga para que puedan permanecer en la situación actual hasta entonces. De todos modos, el paso del TAV hará que tengan que mover su campamento unos metros. Con la intención de que puedan autoconstruirse unas viviendas del mejor calidad se ha organizado este curso, «además de que se pueda dar a conocer otro tipo de construcción, con paja, madera y barro», como señaló ayer el alcalde de Astigarraga, Andoni Gartzia.

El curso va a estar dividido en dos partes, una más teórica de una semana y una segunda más práctica, que conllevará la construcción de dos pequeños recintos en la zona del asentamiento rumano. Por un lado se creará una pequeña sala exagonal que será utilizada en el futuro como pequeño recinto de reuniones donde los menores podrán hacer sus deberes a refugio cuando llueva. Además de ello, se construirá otro recinto que vendría a ser un modelo de casas que les puedan servir luego de guía, que una vez terminada sea utilizada como pequeña oficina para que los responsables municipales puedan reunirse con ellos. El domingo está previsto celebrar una pequeña jornada de puertas abiertas.