Un total de 99 mujeres y sus 98 hijos menores utilizaron el año pasado los recursos de acogida que pone el Gobierno de Navarra a disposición de las víctimas de la violencia de género.

PAMPLONA. Según los datos facilitados hoy por el Ejecutivo foral, 83 mujeres y 75 menores fueron atendidos el centro de urgencias; 10 mujeres y 12 menores en la casa de acogida; y 6 mujeres y 11 menores en los cinco pisos residencia.

Estas cifras son similares a las del año anterior, si bien el Instituto Navarro para la Familia e Igualdad señala que la crisis económica ha provocado que las mujeres que precisan acogida “presenten mayores factores de vulnerabilidad que, en algunos casos, les sitúan incluso en riesgo de exclusión social”.

En cuanto al perfil de las mujeres atendidas en el centro de urgencias (83 de las 99), el 70 % de ellas estaban desempleadas, el 67 % tenía estudios primarios y casi la mitad tenían entre 31 y 45 años (el 48 %) y su origen era extranjero (el 52 %).

El 33% de las mujeres abandonaron el centro para ir a un piso de alquiler, el 18 % regresaron con su agresor y el 10 % a domicilios de familiares. Cinco de las mujeres que fueron acogidas durante 2012 en el centro de urgencias ya habían empleado este recurso en anteriores ocasiones.

Estos datos se desprenden del último informe anual de seguimiento y evaluación del cumplimiento del Acuerdo interinstitucional para la coordinación efectiva en la atención y prevención de la violencia contra las mujeres, correspondiente a 2012.

El centro de urgencias tiene como principal finalidad ofrecer alojamiento y manutención inmediata e incondicional a aquellas mujeres en situación de violencia y a sus hijos menores de edad para facilitar su salida inmediata del domicilio habitual.

Dispone de 12 plazas ampliables a 14 en circunstancias puntuales y extraordinarias. Es un recurso gratuito y de estancia limitada a 7 días, si bien se puede ampliar hasta un mes.

Por su parte la casa de acogida se concibe como un recurso temporal y transitorio dirigido a lograr la normalización de la situación personal y familiar de la mujer víctima de la violencia de género. Dispone de 12 plazas y el tiempo de estancia es de seis meses, prorrogables hasta los nueve si es necesario.

Los pisos tutelados proporcionan un acogimiento residencial en vivienda estándar. Su finalidad es abordar la situación personal, económica o sociolaboral de las víctimas de la violencia de género para lograr su reincorporación a la sociedad de forma autónoma e independiente. El Gobierno foral dispone de cinco pisos y el tiempo de estancia es de un año, pudiéndose ampliar otros seis meses más.

Además el Ejecutivo pone a disposición de as víctimas otros recursos como son los Equipos de Atención Integral a Víctimas de Violencia (EAIV), el Servicio de Atención Jurídica a las Mujeres (SAM) o las prestaciones económicas de emergencia social y por dificultades para la obtención de un empleo.

Los EAIV se encuentran en Tudela y en Estella y en ellos se informa, asiste y deriva a los recursos correspondientes a las víctimas de la violencia de género. EN 2012 tramitaron 262 expedientes, que requirieron 415 atenciones. El 44 % estuvieron centradas en lo social, el 30 % en lo legal y el 26 % en lo psicológico.

El Servicio de Atención Jurídica a las Mujeres (SAM) es financiado por el INAFI y lo prestan los colegios de la abogacía de Pamplona, Estella, Tudela y Tafalla. Prestó 591 asistencias, un 7% menos que el año anterior y también realizó 469 asesoramientos.

En cuanto a las prestaciones económicas, el Gobierno de Navarra concedió a nueve víctimas de la violencia de género sendas ayudas por dificultades para la obtención de un empleo con el fin de favorecer su subsistencia e independencia de la persona agresora.

Esta prestación equivale a seis meses de subsidio de desempleo y se puede incrementar hasta los 24 meses para atender a responsabilidades familiares o situaciones de discapacidad en la unidad familiar. Respecto a las ayudas económicas en casos de emergencia social, en 2012 no hubo ninguna solicitud.

A lo largo del año pasado también se desarrollaron campañas de sensibilización con motivo de la celebración del Día Internacional para la eliminación de la violencia contra las mujeres, el 25 de noviembre; y de las fiestas patronales de 57 ayuntamientos navarros.

Asimismo se inició la redacción de un nuevo proyecto de ley foral contra la violencia de género, el desarrollo de un protocolo de actuación ante la mutilación genital femenina y otro contra la trata de mujeres con fines de explotación sexual.