Los intentos de suicidio son el doble entre inmigrantes latinoamericanos que entre españoles

El País, MARTA AGUIRREGÓMEZCORTA, 03-12-2004

Los inmigrantes latinoamericanos sufren casi el doble de tentativas de suicidio que la población española. Ésta es una de las conclusiones del estudio Problemas de salud mental en los inmigrantes, realizado por la Fundación Jiménez Díaz y la Fundación La Caixa. El 20% de los extranjeros afincados en España lo está en Madrid. De ellos, el 35% son latinoamericanos. El estudio se llevó a cabo entre las personas que fueron atendidas por el servicio de psiquiatría de la Fundación Jiménez Díaz desde octubre de 2002 a abril de 2004. Este hospital cubre las necesidades sanitarias de unas 300.000 personas que viven en los distritos de Arganzuela y Centro; ambos cuentan con una densidad de inmigración del 20%.

Otra de las conclusiones del estudio es que los extranjeros visitan menos que los españoles el servicio de psiquiatría, pero cuando lo hacen sus patologías son más graves. “Esta falta de asistencia psiquiátrica prematura conlleva que tengan mayores tentativas de suicidio”, explicó el responsable del Servicio de Psiquiatría de la Jiménez Díaz, José Luis González Rivera

. “Otro factor que incide es que viven situaciones de mayor estrés, les falta una red social de apoyo y sienten más el desarraigo afectivo”, añadió.

A pesar de que el número de consultas psiquiátricas realizadas por los pacientes inmigrantes es inferior a la esperada según su representación en la población en general, los cuadros más graves como los estados de agitación (12,6% de las consultas), los derivados del abuso de tóxicos (11,5%), las autoagresiones y las tentativas de suicidio (26%) superan las previsiones.

Por el contrario, los trastornos más frecuentes en la población autóctona, como la ansiedad y la depresión, son con mucha menor frecuencia motivo de consulta por parte de la población inmigrante.

La salud, en segundo plano
González Rivera señaló que es frecuente que el inmigrante coloque la salud preventiva en un segundo plano dentro de sus prioridades. “No existen recursos específicos ni de fácil acceso para esta población, lo que dificulta aún más su consulta con los servicios de salud”, dijo. Y añadió que muchos abandonan el tratamiento en el momento en el que empiezan a sentirse un poco mejor, lo que les hace recaer con facilidad.

Los autores señalaron que, en general, las patologías psiquiátricas tienen una epidemiología estadística similar en todos los países. Lo que varía son las formas de presentar la enfermedad y la forma de manifestarla. Aun así, explicaron que “existe el riesgo de caer en errores a la hora de diagnosticar correctamente”. Es decir, en ocasiones se tiende al “sobrediagnóstico”, pues conductas o pensamientos que son aceptadas como normales en el contexto sociocultural del paciente pueden ser calificadas como patológicas en el servicio de psiquiatría.

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