A partir de esta semana, la Casa de Socorro cobrará 89 euros por atención a todos aquellos que no tengan tarjeta de asistencia sanitaria, sea la de Osakidetza, la del Estado o la europea. Hay matizaciones por parte del Ayuntamiento, que asegura que sólo va a cobrarse por el servicio en el caso de que el paciente tenga un seguro privado. Y también por parte de la empresa gestora, que sí incide en esta línea, afirma que no va a exigir cantidad alguna a los indigentes, aunque matiza también que se intenta evitar el «vaya usted por la mañana que es gratis y por la tarde le cobran».

Hasta hace casi dos años, la asistencia era gratuita y universal, pero el Servicio Vasco de Salud, que se encarga del tramo horario nocturno, entre las 5 de la tarde y las 8 de la mañana, decidió cobrar esta tarifa de 89 euros. A partir de esta semana, la empresa que gestiona el resto del horario, Policlínica Gipuzkoa, ha decidido cobrar, aunque se insiste en que no se exigirá ninguna cantidad a los indigentes.

La situación fue denunciada por los socialistas donostiarras, cuyo edil, Denis Itxaso, quiso resaltar la actitud del alcalde Juan Karlos Izagirre, «que pese a ser médico», ha mostrado siempre «una escasa sensibilidad hacia la Casa de Socorro, un servicio sanitario situado en el centro de la capital donostiarra, y con un arraigo importante entre la ciudadanía y con un papel relevante durante las fiestas de la ciudad.

Si se cobra a todo aquel que carece de tarjeta sanitaria, los afectados serían inmigrantes sin txartela, excluidos sociales o visitantes que llegan de fuera de Europa. Y aunque todos los sectores asumen que se va a cobrar, aquí llegan los matices, cuando se trata de precisar el colectivo afectado. Los socialistas tienen claro que será a todos aquellos que no justifiquen su situación sanitaria. El gobierno municipal de Bildu, que se siente especialmente atacado. «La Casa de Socorro presta atención sanitaria a todas las personas que lo solicitan aunque no tenga tarjeta. No se cobra a personas sin recursos ni a aquellas que se encuentran en situación irregular. Está regulado en el pliego de condiciones firmado por Ayuntamiento y Osakidetza». Según el escrito enviado por el gabinete de prensa del Ayuntamiento, sólo se cobra a quienes tienen aseguradoras privadas y no cuentan con la tarjeta. «Hoy mismo se ha cobrado a cuatro extranjeros. El criterio es el mismo que mantiene el Servicio Vasco de Salud».

Desde el gabinete de prensa de Policlínica, la empresa que gestiona el horario municipal, se defiende también que sólo van a equiparse a Osakidetza, pero a pesar de ese matiz sobre que en su horario podrían acudir más personas sin recursos debido a la gratuidad, aseguran también que no se va a cobrar a ningún indigente.

Se asegura, además, que aunque existía la potestad de cobrar a aquellos turistas enfermos sin tarjeta europea, su número era tan bajo que no justificaba la burocracia que conllevaba. «Ha habido un notable incremento de visitantes australianos y americanos, lo que justifica esa posibilidad de cobro que no se aplicaba».