El dramaturgo Juan Carlos Rubio y el director Ignacio García presentan Arizona (en el María Guerrero hasta el 16 de junio), una obra que reflexiona sobre la violencia y la intolerancia que sufren los inmigrantes en la frontera entre EEUU y México. «Me siento muy arropado por ese país. Este espectáculo es un plato mexicano cocinado con ingredientes españoles», dijo García durante la presentación.

Arizona es un musical, que entre comedia, canción y pasos de claqué, se interroga sobre la violencia y la intolerancia que sufren los inmigrantes . Alejandro Calva y Aurora Cano son dos actores mexicanos que se convierten en un estereotipado matrimonio de gringos. «Un americano medio que está contento de tener un buen arsenal de armas en casa» y una «neurótica que pasa tres horas al día peinando y maquillando a su hija para presentarla a los concursos de belleza», aclaró Ignacio García.

«El nivel de impacto de los referentes que hay de EEUU en México son mucho mas abrumadores de los que hay aquí. Hay un tremendo rechazo visceral histórico a lo que representa la frontera en las dos partes», explicó la actriz Aurora Cano, que encarna a Margaret en la obra escrita por Juan Carlos Rubio.

Para los dos actores defender estos personajes, siendo en la vida real del otro lado de la frontera, «implicó un trabajo intenso», pero como aseguró Cano, a los personajes siempre «hay que defenderlos con todo y de verdad».

No obstante, Juan Carlos Rubio no sólo quería hablar de México en Arizona: «Me gustaría que de un lugar terrible llegáramos a (asumir) nuestra responsabilidad global, nuestros propios sures y nuestros nortes».