Mueren once inmigrantes en el naufragio de una embarcación en el norte de Marruecos
Un barco se encontraba a la deriva a unos 15 kilómetros de la playa de Sid El Abed, cerca de Alhucemas
La Voz de Galicia, , 18-04-2013Once inmigrantes han muerto hoy en el naufragio de una embarcación que navegaba a la deriva en las costas del norte de Marruecos. Según informó a Efe Ahmed Uddish, director regional de sanidad en el Hospital Mohamed V de Alhucemas, al centro sanitario «han llegado 11 cadáveres de seis hombres, tres niños y dos mujeres».
Uddish señaló que 12 personas, entre ellas tres mujeres, fueron trasladadas al hospital, y una de ellas que estaba embarazada perdió al bebé por lo que está siendo atendida en los servicios ginecológicos. Entre los fallecidos y los rescatados hay varias personas de nacionalidad maliense y senegalesa, explicó el doctor que no pudo precisar las nacionalidades exactas. Uddish indicó que como consecuencia del naufragio las 12 personas llegaron al hospital «en un estado catastrófico pero ya se encuentran estables y se les ha proporcionado ropa y comida».
Por su parte, las autoridades locales, citadas por la agencia marroquí MAP, informaron que los servicios de la Marina Real de Alhucemas rescataron de una embarcación tipo zodiac a un total de 34 inmigrantes (23 hombres, 10 mujeres y un niño) y los cuerpos sin vida de 10 personas. Las mismas fuentes señalaron que una de las mujeres que fue rescatada falleció cuando era traslada al hospital.
El operativo de búsqueda se puso en marcha esta mañana tras la recepción de una llamada del capitán de un barco de pesca que alertó de que una embarcación con varios emigrantes a bordo se encontraba a la deriva a unos 15 kilómetros de la playa de Sid El Abed, cerca de Alhucemas.
El último gran naufragio en las costas de Marruecos se produjo el pasado mes de octubre cuando catorce emigrantes subsaharianos murieron y 17 fueron rescatados en el mar de Alborán, entre España y Marruecos.
Miles de emigrantes del África subsahariana se concentran en Marruecos y de manera periódica intentan alcanzar las costas españolas, aunque muchos de ellos acaban instalándose en localidades marroquíes, donde subsisten en condiciones difíciles y con una complicada situación legal.
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