Al menos 45 personas han muerto al naufragar frente a las costas nigerianas un bote con 166 inmigrantes ilegales a bordo que se dirigía a Gabón, según han informado testigos y fuentes médicas a la agencia de noticias Reuters.

Kive Sani, de 27 años y uno de los supervivientes, ha relatado que acordó con un hombre nigeriano que le consiguiera un buen trabajo en Gabón a cambio de pagarle parte de su salario por un periodo indefinido. Hafsat Zakare, de 13 años, otro superviviente, ha indicado que la mayoría de las personas que iban a bordo del bote eran mujeres y niños de África Occidental. Las autoridades nigerianas creen que casi todas eran de Ghana.

La embarcación partió el pasado viernes de la localidad nigeriana de Oron a través del golfo de Guinea. “Una gran ola golpeó el bote y arrancó el motor, entonces comenzó a inundarse”, ha dicho Zakare, que consiguió sobrevivir aferrándose a una bombona de gas vacía.

El director de la Agencia de Gestión de Emergencias Estatal de Cross River (SEMA), Vicent Aquah, ha informado de que hasta ahora 27 personas han sido rescatadas y de que el operativo de búsqueda de supervivientes sigue en marcha. Por otro lado, un médico forense local ha revelado a la agencia de noticias británica que el pasado martes ya había 45 fallecidos a causa del naufragio, aunque este extremo carece de confirmación oficial.

Los accidentes marinos son bastante comunes en Africa. En 2010, un barco se hundió en un río de República Democrática del Congo dejando 138 muertos. En 2008, en un accidente similar, 35 personas fallecieron cuando su barco se dirigía desde Nigeria a Gabón.