Inmigrantes manifestándose, ayer, por el centro de Murcia. :: F. MANZANERA

Más de doscientas personas recorrieron ayer las calles de Murcia en una manifestación convocada por la asociación SOS Racismo por los derechos de los inmigrantes . Los manifestantes reclamaron sanidad pública para todos los ciudadanos y exigieron el cierre de los centros de internamiento de extranjeros (CIEs). Este grupo, que marchó desde la Plaza Circular hasta la puerta de la Delegación del Gobierno, también denunció que se están produciendo casos de explotación laboral en la Región. «Estamos sufriendo muchos abusos», proclamaba uno de los manifestantes. «Hacemos jornadas de catorce horas, sin dar de alta y el dinero no nos da ni para pagar la gasolina para ir a trabajar».

Entre las reivindicaciones de los manifestantes, que portaban pancartas en castellano y árabe, también figura la apertura en Murcia de oficinas de algunos consulados para evitar tener que desplazarse a Valencia para realizar trámites. «Estamos aquí abandonados por el Gobierno de España», recalcaron, «y por el nuestro».